La junta directiva de Joan Laporta tuvo que cerrar este martes a altas horas de la noche el aval para volver al trono azulgrana. Lo hará tras alcanzar un acuerdo con Audax Renovables, empresa de José Elías que tendrá como representante a Eduard Romeu dentro de la junta directiva como vicepresidente económico.
La próxima cúpula debía avalar la cifra más alta de la historia del FC Barcelona: 124,6 millones de euros. En las últimas horas, a parte de acudir a la empresa de energías renovables, tanteó a varios empresarios catalanes con alto nivel adquisitivo para que se integraran a la junta directiva.
Laporta, celebrando su victoria en las elecciones del Barça | EFE
Uno de los que cumple el perfil es el exvicepresidente institucional y precandidato a las elecciones Emili Rousaud. Factor Energía, su empresa, factura más de 380 millones de euros y no tendría problemas en colaborar en el aval. Eso sí, estuvo con Josep Maria Bartomeu y ya participó en las elecciones liderando una candidatura.
“No me han hecho ninguna propuesta”
Emili Rousaud habló en Catalunya Ràdio sobre los avales de Joan Laporta y descartó que el presidente le haya pedido ayuda económica: “No me ha hecho ninguna propuesta. Tengo buena relación con él. Después de su victoria, le envié un Whats App para felicitarle. El Barça necesita un presidente y tomar decisiones”.
“Laporta no se esperaba encontrarse con esta dificultad. No son dificultades que vengan del que pide el aval, sino de que la situación del club es compleja. Han desaparecido ingresos muy importantes y no se han reducido los gastos en la misma proporción. Se están acumulando pérdidas. El riesgo que asume la banca es más importante. Además, hay un nivel de incertidumbre. No ha vuelto el público al estadio, ni se ha recuperado el ticketing”, añadía el empresario.
Emili Rousaud en su último acto como precandidato a las elecciones / 'Els millors, al Barça!'
Rousaud apuntó que “el dinero es miedoso y quieren asegurar que se cumplirá” y exculpó a Laporta con un “cuando Laporta gana y lo tiene que formalizar, es cuando ve las condiciones negro sobre blanco. Y es cuando ve que la contra garantía es muy alta. Todo depende del riesgo que perciba el avalista. No depende del ganador de las elecciones, sino del entorno económico en el que estamos, motivado por la pandemia”.
En la misma línea, considera que toda esta situación con los avales viene de la situación económica y no de la figura del presidente. “Es especialmente complicado conseguir avales porque la situación económica y patrimonial del club es muy compleja. Ya dije que era la peor de la historia. Pide que el aval tenga unas garantías y el porcentaje es más elevado”, sentenció el empresario.