Joan Laporta ha tenido que negociar a contrarreloj el aval del FC Barcelona. Para acceder a la presidencia, tras salir vencedor de las elecciones, el equipo del abogado debía avalar 124,6 millones de euros. Este debe ser presentado a la Liga antes del miércoles por la noche, cuando está previsto que suceda el traspaso de poderes con Carles Tusquets.
En las últimas horas ha sido clave la negociación la entrada de Audax Renovables, que tendrá a un directivo en la junta directiva azulgrana. En un principio, debía entrar José Elías, propietario y presidente de la empresa de energías renovables, pero no cumple con las condiciones necesarias, como la antigüedad de socio.
Eduard Romeu y José Elías en un acto con Audax / Redes
En su lugar entraría el vicepresidente de la compañía, Eduard Romeu, que ocuparía el cargo dentro de la presidencia azulgrana de vicepresidente económico, plaza vacante tras la salida de Jaume Giró. La empresa catalana quiere asegurarse tener el control financiero de la entidad después de poner parte del aval.
La estrategia (fallida) de Laporta
Las últimas horas para cerrar el acuerdo han sido frenéticas. Desde que dimitió Jaume Giró el pasado sábado apareció el nombre de Romeu como sustituto. Al ser un socio claramente capitalista para cumplir los avales, Audax Renovables pedía contraprestaciones como más poder y control económico.
Este lunes por la noche parecía que caía la opción del vicepresidente de la compañía, pues Joan Laporta no estaba de acuerdo en ceder poder a cambio del aval. La solución por la que apostaron entonces fue ir a buscar a cuatro directivos más --empresarios con grandes fortunas de Catalunya-- para que completaran el equipo.
Joan Laporta celebra la victoria electoral del 7 de marzo / CULEMANIA
No hubo éxito y la candidatura ha tenido que hacer marcha atrás y volver a coger el hilo de Audax Renovables. La energética catalana tendrá un cargo de responsabilidad dentro de la cúpula del FC Barcelona a cambio de aportar el dinero necesario para alcanzar el aval. Veremos cual es la cantidad final.
Directivos con nivel adquisitivo
Fuentes cercanas a la junta directiva de Joan Laporta apuntan que, de los 14 directivos con los que cuenta el presidente tras la salida de Jaume Giró, siete tendrían un nivel adquisitivo muy alto. Los siete restantes no tendrían tanto dinero para participar en complementar el aval, pero sí la confianza del presidente.
Por ese motivo, la candidatura buscaba ampliar con cuatro directivos (capitalistas) la junta y ocupar la plaza vacante de la vicepresidencia económica. Serán finalmente, si no se tuercen las cosas, 19 directivos, cuatro más de los que ganaron las elecciones el 7M y dos menos del límite que marcan los estatutos.