Presentar el aval bancario necesario para presidir el FC Barcelona ha traído de cabeza en los últimos días a Joan Laporta. El candidato que ganó las elecciones del club azulgrana el pasado 7 de marzo firmó este martes la garantía económica para poder ser investido presidente, a muy tardar este miércoles para cumplir con los estatutos de la entidad deportiva.
Es necesario tener en cuenta que el pasado sábado se sucedió una renuncia importante de uno de los miembros de su candidatura, Estimem al Barça: Jaume Giró, el que iba a ser su vicepresidente económico. Desde que eso sucedió, Laporta ha presentado a cuatro nuevos miembros para su junta directiva.
Laporta tiene su primera crisis en el Barça tras ganar las elecciones y antes de ser investido presidente / EFE
Laporta pisó el acelerador este lunes, consciente de que se le empezaban a acabar las horas para conseguir el aval. Una cantidad que debe garantizar el futuro presidente del Barça, que corresponde al 15% del presupuesto anual del club azulgrana, actualmente cifrado en la cantidad de 124,6 millones de euros. Un valor que se ha multiplicado por seis en 18 años (desde 2003).
El importe del aval
En el último siglo, el importe del aval necesario para ser presidente del FC Barcelona se ha incrementado exponencialmente. Cuando Laporta llegó a la presidencia por primera vez en 2003, el abogado tuvo que presentar como aval una cuantía de 20 millones, seis veces menos la cantidad que se le ha requerido para este segundo mandato.
Por su parte, cuando Sandro Rosell tomó la presidencia en 2010, la cantidad del aval que tuvo que presentar ascendió a 60 millones de euros. Lo que significa que, tras el fin de la primera presidencia de Laporta, el importe de esta garantía aumentó 40 millones, es decir, se triplicó en tan sólo siete años.
Bartomeu y Rosell saludándose en un acto / Redes
En enero de 2014, Rosell renunció a la presidencia del Barcelona y Josep María Bartomeu asumió el cargo en funciones hasta 2015, cuando se celebraron las elecciones. Bartomeu fue elegido presidente por elección de los socios. Entonces, en 2015 no se presentó ningún aval porque, al ganar el presidente que ostentaba ya el mandato, no hacía falta hacerlo.
100 millones más en 18 años
Los estatutos del club y la legislación vigente (Ley del Deporte y Ley de Sociedades Anónimas Deportivas) prevén que si gana las elecciones una candidatura continuista no hace falta presentar los avales, ya que les sirven los beneficios que han ido generando durante su mandato anterior o su tiempo como presidente en funciones. Eso fue lo que pasó con Bartomeu, que cerró la temporada 2014/15 con unos beneficios para el club azulgrana de 69 millones de euros y que en la temporada 2015/16 ascendieron hasta los 97 millones.
Patrimonio del Barça en los últimos 10 años / FCB
En caso de haber ganado Laporta en 2015, al expresidente le habría tocado avalar 80 millones. Una cifra que ascendió en 20 millones en sólo cuatro años. Pero la subida más significativa del importe del aval ha sido la de 2021, que ha aumentado en 100 millones en 18 años.
Para ser proclamado presidente, Laporta se ha visto obligado a presentar una garantía de 124 millones de euros, es decir, 44 millones más de los que hubiera tenido que presentar si hubiera ganado en 2015. Pero para esta temporada, el Barça de Bartomeu no tenía presentado el presupuesto de gastos, solamente el de ingresos, y ascendía a casi 800 millones de euros. Posteriormente, ya con la junta gestora al mando, el club hizo oficial un presupuesto de gastos por cuantía similar: 796 millones de euros. El 15% son casi 120 millones.
Laporta y Bartomeu, en una imagen de archivo | EFE
Aunque no se hayan cumplido ni se vayan a cumplir debido al impacto de la pandemia del Coronavirus, el aval de Laporta tiene que corresponder a ese 15% del importe presupuestado. Lo que ha supuesto un verdadero quebradero de cabeza para el abogado.