Poco a poco, empiezan a conocerse más detalles del equipo que acompañará al nuevo presidente Joan Laporta en el FC Barcelona. Más allá de su junta directiva, presentada durante la carrera electoral; Laporta también ha confirmado a Ferran Reverter como CEO del club, y a Mateu Alemany como nuevo director de fútbol para aportar su experiencia y conocimientos sobre el funcionamiento actual del mundo del fútbol.
A estos dos se les unirá Jordi Cruyff, que cuando resuelva su situación contractual con el Shenzhen chino, se unirá también al proyecto de Laporta para hacerse cargo de la secretaría técnica o la dirección deportiva. Asimismo, no descarta que Ramon Planes, actual secretario técnico, y Jose Mari Bakero, responsable de los cedidos, sigan con ellos en la misma estructura.
Laporta con Mateu Alemany / EFE
Por tanto, pese a que todavía faltan detalles que Laporta ofrecerá cuando presente el aval a la Liga y sea oficialmente presidente; es evidente que su estructura deportiva está cada vez más definida. Y si no hay ningún contratiempo de última hora, en este equipo no aparecerá el excapitán Carles Puyol, al que le tiene reservado un cargo completamente distinto: el de encargado de la Fundació Barça y embajador de la entidad.
Cada vez más alejado de la faceta deportiva
Tras anunciar su retirada en 2014, Carles Puyol diversificó su carrera profesional en varios frentes, la gran mayoría relacionados con el mundo del fútbol. Una de sus primeras funciones la realizó como adjunto a la secretaría técnica con Andoni Zubizarreta al frente. Duró tres meses y medio en un cargo que abandonó tras el cese de Zubizarreta en enero de 2015.
Carles Puyol, en una imagen de archivo | EFE
Entonces, la leyenda blaugrana decidió adentrarse en el mundo de la representación de jugadores junto al también ex jugador Iván de la Peña y el abogado Ramon Sostres. Futbolistas como Éric García, Marc Bartra, Bojan Krkic, Carles Aleñá, Eric Garcia o Adrià Bernabé están asesorados por esta empresa, de la que ya tampoco forma parte un Puyol que lo dejó en verano de 2018 para dar un nuevo rumbo a su carrera, y alejarse todavía más de la faceta deportiva.
Desde entonces, se ha encontrado con muchos frentes abiertos en su carrera laboral. Ha formado parte de varias campañas solidarias, aunque sobre todo se le ha visto en varios actos como embajador de la Liga y la UEFA. Todo, mientras disfruta de una vida mucho más sosegada junto a su mujer y sus hijos.
No hay duda de que Puyol formará parte del organigrama de Laporta. Su buena relación con el nuevo presidente hace que su hueco esté garantizado, si él quiere. De hecho, Rafael Yuste, vicepresidente deportivo, comentó hace algo pocos días que esperan poder contar con la leyenda culé en el organigrama.
Puyol, junto a Joan Laporta en una imagen de archivo | EFE
Sin embargo, los últimos pasos de Puyol en su carrera profesional demuestran que ahora mismo, sus principales ambiciones están lejos de la faceta deportiva. Quiere continuar trabajando en el ámbito social y como embajador. Y parece que ese será precisamente el puesto que le ofrecerá Laporta, como pieza importante de la Fundación Barça y actuando como embajador de la entidad.