Josep María Bartomeu ha sido puesto en libertad. Después de ser detenido el lunes por la mañana y permanecer más de 24 horas bajo arresto en la comisaría de Les Corts, pasando la noche en el calabozo, el expresidente del Barça ya puede volver a su vida normal.
Bartomeu y el que fuera se asesor de presidencia, Jaume Masferrer, durmieron en celdas separadas de las dependencias policiales. Este martes han sido llamados a declarar ante la magistrada del juzgado de instrucción número 13 de Barcelona. Ninguno de los dos, asesorados por la abogada Olga Tubau y Antonio Hernández, ha querido prestar declaración porque la causa estaba bajo secreto de sumario. Tras negarse a declarar, ambos han sido puestos en libertad.
Posteriormente, la magistrada Alejandra Gil ha levantado el secreto de sumario del llamado Barçagate, que se prolongaba desde hacía seis meses. Esta ha sido la otra gran noticia de la mañana, ya que a partir de ahora se podrán conocer más detalles de la causa. Y, entre otros, destaca uno por encima de todos: el Barça como entidad jurídica no está en riesgo.
Todavía no están imputados
La causa continúa abierta y todo apunta que los cuatro detenidos del lunes --Bartomeu, Masferrer, Òscar Grau y Román Gómez Ponti-- seguirán investigados, aunque procesalmente todavía no están formalmente imputados. El Barça como persona jurídica está totalmente limpio y al margen del caso. Únicamente podrá intervenir como perjudicado en caso de que se deriven responsabilidades.
El otro implicado es la plataforma Dignitat Blaugrana, que interpuso la denuncia que ha llevado a los dirigentes del Barça a los tribunales. Ahora, este colectivo tendrá que decidir si sigue en el proceso como acusación popular de forma paralela a la acusación pública, el Ministerio Fiscal.