Joan Laporta sigue en su línea y no quiere que la junta gestora del FC Barcelona se extralimite de sus funciones. Quedan cuatro días para que se cierre el mercado de fichajes invernal y Carles Tusquets y su equipo están legitimados para cerrar traspasos pese a no ser elegidos por los socios.
Este miércoles, Víctor Font exigió a la directiva provisional que ejecute esa operación y que intente el fichaje de Éric García. El líder de Sí al futur apuntó que podría llegar por solo tres millones de euros fijos más otros en variables y que durante los seis primeros euros no cobraría. Su precio esta temporada solamente sería de 230.000 euros.
Éric García en un partido del Manchester City / EFE
Es conocido que el empresario es partidario de que esa operación se realice, mientras que otros candidatos, como Joan Laporta y Toni Freixa, no lo contemplan. Al no haber una unanimidad, Carles Tusquets a priori no realizará la operación. Este martes, en la última reunión, se volvió a tratar el tema.
Contrario al fichaje invernal
Laporta valoró las últimas noticias de la entidad --fecha de las elecciones, Éric García, memoria económica…-- en rueda de prensa. Fue más contundente de lo que nos tiene acostumbrados con un “después de escuchar las explicaciones de la situación económica del club, me mantengo en la postura inicial”.
Y respondiendo a Víctor Font, comentó que “los candidatos no podemos atribuir a la junta gestora funciones que no tiene. Si un jugador quiere venir al Barça, tiene que demostrarlo. Si llegase gratis, no entiendo porque tendríamos que regalar dinero a un club competidor nuestro, al Manchester City”.
Víctor Font en un acto de campaña electoral / Culemanía
Sobre el precio, los 230.000 anunciados por Sí al futur, apuntó que “siempre se habló de unas cantidades que ahora parece que son otras. Pero insisto, la gestora no se debe extralimitar en sus funciones y debe esperar a que haya un nuevo presidente. Es un dinero que no tendríamos que pagar en junio".
Mandó otro contundente aviso a Tusquets y a su equipo: "No entendería que la gestora se atribuyera atribuciones como negociar un salario, dar una comisión al agente del jugador... Son cosas que no las entendería, y menos en la situación de máxima preocupación en la que estamos. Posición muy clara".