Desde que Joan Laporta presentó oficialmente su precandaditura a las elecciones del 24 de enero para ser el próximo presidente del FC Barcelona, Víctor Font no levanta cabeza. Su candidatura, Sí al Futur, se ha visto eclipsada este mes de diciembre por Estimem el Barça. Ahora Laporta podría ser más favorito que él.
De hecho, en un primer momento, se pidió desde sectores independentistas que Laporta y Font fueran en una misma candidatura. Pero, tal y como dijo el expresidente en la presentación el pasado 30 de noviembre, “a estas alturas, si se presenta una candidatura, los pactos son muy complicados. Tenemos nuestro proyecto. Ya os he dicho como lo enfoco. Las personas que me acompañan las tenemos muy definidas. Haremos las propuestas a los socios. No veo unas alianzas con otros candidatos”.
Joan Laporta y Víctor Font en un fotomontaje / Culemania
Joan Laporta y Víctor Font en un fotomontaje / Culemania
Mientras el expresidente se limitó a decir un “no me convenció su proyecto (de Font)”, Víctor sí dio más detalles: “creo que no hubo un encaje entre dos maneras de gobernar el club. Debemos tener más en cuenta a los socios. Yo creo que a él le gustaría negociar la misma manera que 2003. Hace falta fuego nuevo y por eso estamos aquí”.
Dos candidaturas diferentes
Por ahora, parece que donde chocan los dos programas de Laporta y Font es en el sistema de gobierno del club. Sí al futur propone una fórmula más asamblearia y menos jerárquica, mientras Estimem el Barça es más presidencialista, un modelo que han comparado ya con el de Jesús Gil en el Atlético de Madrid.
Si el pilar de proyecto de Laporta en 2009 era Guardiola, Font quería que Xavi Hernández fuera el suyo. Pero, lejos de poder cumplir sus expectativas, la candidatura de Sí al futur recibió tres reveses en una sola semana: la caída de Jordi Majó y Xavi Hernández de la lista de Font y la gran repercusión que tuvo la lona que colgó Laporta cerca del Santiago Bernabeu en Madrid.
Joan Laporta y Víctor Font en foto de archivo / CULEMANÍA
Joan Laporta y Víctor Font en foto de archivo / CULEMANÍA
Siete días le bastaron a Laporta para desbancar el proyecto en el que Font había trabajado durante siete años. Este mes de diciembre, el expresidente ha ganado mucho terreno de cara a las elecciones del próximo 24 de enero.
Pero Laporta ha tenido este lunes un contratiempo: debe desmentir si habló con Leo Messi o no, después de que el crack argentino haya negado haberse puesto en contacto con ningún candidato a la presidencia en su entrevista con Jordi Évole de este domingo.