Freixa, Rousaud, Farré y Vilajoana: cuatro hombres con un mismo destino

"Queremos poner a los socios en el centro del proyecto", afirma Jordi Farré, precandidato a la presidencia del FC Barcelona. Un mensaje que casa mucho con el que están lanzando otros precandidatos como Toni Freixa, que insiste en "situar al socio como epicentro de las propuestas". Xavier Vilajoana también ha lanzado ya diferentes propuestas muy encaminadas a mejorar la relación y, sobre todo, la participación del socio en el club. No tanto Emili Rousaud, que de momento presiste en hablar de la reconstrucción económica del club desde la reconstrucción del equipo y en alimentar fichajes estelares como el de Neymar, algo en lo que también coincide Farré. 

Las sinergias entre estos cuatro precandidatos son cada vez más evidentes y, aunque algunas diferencias importantes los separan, saben que tienen algo en común: la lucha por las firmas es muy difícil y para plantar cara a Joan Laporta, incluso a Víctor Font, pueden hacer más daño juntos que por separado. Todavía no es el momento de establecer alianzas porque primero tienen que consolidarse individualmente y ver las capacidades de cada uno para aglutinar papeletas, pero llegado el momento pueden hacer bueno el dicho la unión hace la fuerza. 

Todos son conscientes, aunque no lo reconozcan en público, de que lo tienen más que difícil para asaltar el trono del Barça. Al menos, si lo hacen por separado. Pero tal vez tendrían más chance contra los dos favoritos si unen sus fuerzas. Además, cuentan con la ventaja de que el perfil votante de Laporta y Font es muy parecido: antinuñista y/o independentista. 

Ideología política

Por suerte o por desgracia, la ideología política es uno de los temas que marca estas elecciones y diferencia a sus candidatos, ya que las propuestas tampoco difieren en exceso. Todos apuestan por el fútbol formativo y por un estilo de juego basado en el cruyffismo. Todos apuestan por una política económica de austeridad en estos tiempos difíciles. Y las diferencias vienen más en torno al futuro de Messi --algunos se mojan mucho y estarían dispuestos a hipotecarse por su continuidad y otros asumen que si se va no pasa nada, lo primero es el club--, el Espai Barça o a la firma de determinados fichajes, como podría ser el propio Neymar, que tiene divididos a los candidatos aunque mayoritariamente no lo quieren de vuelta. 

Emili Rousaud, en su sede electoral, situada en Les Corts, como las de Farré y Freixa / CM

Ante esta tesitura, y dando por sentado que los proyectos de Freixa, Rousaud, Farré y Vilajoana no apuestan por un posicionamiento político fuerte en relación al Procés --los dos primeros no son independentistas, mientras que los dos segundos sí que lo son pero defienden que el Barça tiene que estar al margen de cuestiones políticas pese a lo que simboliza para Cataluña--, parece obvio que tanto el votante nuñista como el votante no independentista podría decantarse por una de estas cuatro opciones. ¿Y si esas cuatro vías fueran la misma?

Preguntados sobre posibles alianzas

De momento es especular, pero a priori Toni Freixa parece el candidato más influyente de los cuatro. También ha sido el más contundente a la hora de descartar alianzas, en declaraciones a Culemanía: "Nosotros somos fuertes. No pensamos en aliarnos con nadie". Una respuesta similar a la que dio Farré, también a pregunta de este medio: "No pactaré con ninguna candidatura, pero no impediré a nadie que se quiera unir a nuestro proyecto que lo haga". 

Vilajoana también se mostró más o menos igual de contundente en una reciente entrevista con Culemanía: "Yo no me he planteado ningún pacto en ningún sentido. Tengo el camino trazado, un proyecto muy serio, muy trabajado, con un equipo muy potente y a partir de ahí no me he planteado nada más". Por último, Rousaud, que ha sido el más conciliador, también respondió la misma pregunta a este medio después de hacer un guiño tanto a Freixa como a Farré por el hecho de haber buscado una sede también en el barrio de Les Corts. 

Freixa, muy próximo a Rousaud y Vilajoana 

"Nos hemos reunidos con prácticamente todos los precandidatos y esta idea no ha cuajado. Parece que nadie es consciente de la situación que tiene el club. No entiendo porque no dejamos atrás los ismos y nos ponemos a servicio del club. Todos somos buenos barcelonistas. ¿Por qué no hacemos el paso? Algún precandidato que no nos apoyó en esto, luego habla de unión. El problema es muy grave", analizó Rousaud. 

Toni Freixa ficha a Lluís Carreras para su candidatura 'Fidels al Barça' / CULEMANIA

Viendo los perfiles de Freixa y de los otros tres precandidatos mencionados, tan diferentes y especializados en una temática concreta, no sería descabellado pensar que juntos podrían encabezar una junta directiva potente en torno al abogado, uno de los aspirantes que más sabe sobre el Barça, a pesar de que también tiene sus feroces detractores. La posibilidad que más opciones gana en estos momentos sería una alianza entre Toni Freixa y Emili Rousaud, pero no habría que descartar más pactos. David Vilajoana, hermano del precandidato, acompañó a Freixa en 2015 y tiene una concepción de lo que debe ser el Barça muy cercana a la que propone Lluís Carreras, el director de fútbol presentado por Toni. 

Perfiles muy diferenciados 

Emili Rousaud representa el perfil más económico, probablemente lo que más necesita ahora el Barça. Un empresario contrastado, un gestor solvente que podría asumir perfectamente una vicepresidencia económica. Jordi Farré tiene un perfil claramente social. Su experiencia como seguidor culé en innumerables viajes acompañando a los equipos de las diferentes secciones y sus ambiciosas propuestas que fueron presentadas este mismo jueves le darían consistencia para ser un buen vicepresidente del área social. Mientras que Vilajoana es claramente el perfil más futbolero de todos. Tiene experiencia demostrada con el fútbol formativo y, como suele decir, es el único que ha vestido la camiseta azulgrana como jugador profesional, algo que no se ve en un presidente azulgrana desde Gamper. Que llegue a la poltrona presidencial está difícil, pero esa experiencia le daría un valor añadido como vicepresidente deportivo. 

Probablemente en estos momentos alguno de ellos ni siquiera contempla este escenario, aunque Rousaud ya ha dado a entender varias veces que estaría dispuesto a sumar esfuerzos y que no tiene la obsesión de ser el cabeza de cartel. A medida que avance la campaña, y sobre todo en función de cómo se desarrolle el corte de firmas, los cuatro pueden ir tomando consciencia de que su unión puede ser la única fórmula para derrotar a un Laporta que, con permiso de Víctor Font, es cada día más favorito.