Joan Laporta oficializará su candidatura a la presidencia del FC Barcelona este lunes en un acto por todo lo grande. El expresidente, como ya informó Culemanía, ha decidido presentarse a los comicios azulgranas y ya han corrido rumores sobre qué jugador tendría casi cerrado y usaría como supuesta carta electoral.
Este no es otro que Erling Haaland, uno de los nombres del momento en Europa. El delantero del Borussia Dortmund sigue en racha tanto en la Bundesliga como en la Champions League. Esta temporada en 13 partidos oficiales lleva 17 goles. Si sigue en esta línea, poco más durará en el Signal Iduna Park.
El noruego llegó a Alemania el pasado mes de enero procedente del RedBull Salzburg por 20 millones de euros. Según el contrato que firmó con los amarillos, podría haber salido este verano si alguien abonaba 75 millones. Sonó con fuerza por el Real Madrid y por el Manchester United pero la crisis económica provocada por el coronavirus imposibilitó cualquier operación.
Haaland celebra el gol contra el Schalke 04 / EFE
Aunque parece ahora mismo una utopía en plena rebaja salarial en el Camp Nou, es una carta real que puede usar Joan Laporta para convencer a los socios en los comicios. Es clave la buena relación que tiene el expresidente con el representante del joven ariete de 20 años, Mino Raiola, un nombre más que popular en el mundo del fútbol.
Mino Raiola, clave otra vez
Laporta y el representante italiano mantienen una excelente relación y facilitaría las cosas para que Haaland pudiera vestir de azulgrana. Y es que no es la primera vez que el abogado aprovecha los contactos con Raiola para marcarse un jugador como carta electoral. En las últimas elecciones, en 2015, lo hizo con Paul Pogba, entonces en la Juventus de Turín.
El centrocampista francés, también representado por Mino, quería salir de la Serie A y probar nuevas aventuras. Se le situó en varias ocasiones en órbita Barça pero finalmente, al no ganar el expresidente esas elecciones, se fue al Manchester United. En verano de 2016 pagaron un total de 105 millones de euros.
Mino Raiola, junto a su representado Paul Pogba | EFE
El propio Mino Raiola reconoció los contactos con Laporta y la posibilidad de que su representado terminara en el Camp Nou. “Si (Joan Laporta) gana las elecciones, Pogba tiene muchas opciones de ir al Barcelona. Primero tendrá que negociar conmigo y después con la Juventus, pero se puede hacer”, apuntó el italiano.
El entonces candidato tampoco se escondió con un “la clave es Mino Raiola, es el que decide. Yo no me jugaría nada a que Pogba no vendrá al Barça antes de comenzar este año”. Finalmente, el galo no aterrizó a Barcelona, pero ahora podría volver a tener una importancia crucial su representante con Erling Haaland.
En los últimos años, el nombre del italiano ha vuelto a sonar en los despachos del Camp Nou. En 2019, el Barça no se escondió y expresó su deseo de fichar a Matthijs de Ligt, a quien también representa Mino. Tras brillar en el Ajax de Ámsterdam, el joven central tenía un amplio abanico de posibilidades para dar el salto a una gran liga.
Una foto de Matthijs de Ligt, jugador de la Juventus / Instagram
Negociaron con los culés y el acuerdo estuvo muy cerca de firmarse, pero finalmente se decidieron por la Juventus de Turín, donde el agente tiene grandes relaciones y donde le ofrecían un salario más alto. El holandés prefirió las condiciones económicas de Italia y dejó a los culés sin su objetivo prioritario.
La primera vez
La primera vez que apareció el nombre de Mino Raiola en Barcelona fue en 2009. Tras ganar el triplete, a petición de Pep Guardiola, se fichó a Zlatan Ibrahimovic del Inter de Milán. Firmó por cinco temporadas y se pagaron 46 millones de euros más Samuel Eto’o, valorado en 20 millones. Una de las operaciones más caras por aquel entonces.
A su vez llegó Maxwell, con quien el sueco compartía representante, para reforzar el lateral izquierdo. Un éxito total para el agente. Y es que se garantizó en Barcelona varias comisiones como tres millones para facilitar el traspaso y un 10% de la ficha anual del futbolista, unos 1,2 millones de euros.
Mino Raiola y Ibrahimovic en una imagen de archivo / EFE
Aunque el sueco salió al AC Milán un verano después, en 2010, como cedido con obligación de compra de 24 millones de euros; el Barça le siguió pagando a Raiola los 1,2 millones de euros hasta 2014. Así lo decía su contrato. Por facilitar este fichaje, se embolsó un total de 9 millones de euros.