El FC Barcelona vive una situación tremendamente delicada a nivel económico e institucional. Por un lado, debe equilibrar 300 millones de euros entre gastos e ingresos para no volver a cerrar el ejercicio con pérdidas. Y es un papel que corresponde a la comisión gestora después de que Josep Maria Bartomeu y el resto de la junta directiva presentaran la dimisión el pasado martes 27 de octubre.
Por si le faltara algo al club azulgrana, la empresa Muro Cortina Modular Renting (MCM) presentó este miércoles una demanda ante el Juzgado de lo Mercantil nº 12 de Barcelona en la que pidió que se declare a la institución culé en concurso de acreedores. El objetivo de la compañía es cobrar los 3,5 millones de euros que reclama al FC Barcelona por la construcción de la fachada de La Masía.
"Insolvencia inminente"
MCM solicita el concurso de acreedores ante el temor de que la entidad catalana entre en una situación de "insolvencia inminente". La compañía considera que es fundamental para "no menoscabar los derechos de los acreedores" por el momento de "estrangulamiento financiero" que vive el Barça.
Imagen de archivo de La Masia / EFE
La empresa española basa su demanda en el hecho de que el club azulgrana ha constituido una mesa de negociación con sus trabajadores deportivos y no deportivos para recortar sus salarios. Algo que desde la propia entidad tildan de imprescindible para equilibrar el presupuesto de la presente temporada.
Por lo tanto, MCM pide a la justicia que designe "un administrador concursal en sustitución de la actual junta gestora para la salvaguardia del patrimonio social del FC Barcelona".
Nueva batalla
La petición de MCM a la justicia es una nueva batalla en la guerra entre el FC Barcelona y la propia empresa. Ésta denuncia que la institución le debe 1,9 millones de euros más IVA por la construcción de doble piel de la fachada de La Masía. Según la versión de la compañía, la fecha límite para pagar la deuda era el 30 de junio de 2017.
Imagen de archivo de La Masía / FCB
El Barça, por su parte, reclama la existencia de daños estructurales en la fachada de La Masía que le han costado más de 250.000 euros en reparaciones hasta el momento. Asimismo, MCM solicitó una indemnización de 99,3 millones de euros por incumplimiento de contrato, al entender que los culés no le habían permitido explotar la publicidad del edificio de las categorías inferiores.
La solicitud de un concurso de acreedores en el FC Barcelona es el último episodio de la guerra que han mantenido MCM y la entidad catalana en el último lustro.