El vestuario y la directiva del Barça, poco a poco, parece que empiezan a entenderse. La cúpula del club culé sigue trabajando en solventar las pérdidas provocadas por el coronavirus, a través de una redistribución salarial tanto a futbolistas como empleados. La intención de la entidad es reducir en un 30% los gastos de la temporada que viene, y para ello evidentemente deben llegar a un acuerdo con los jugadores, que ocupan gran parte del desembolso.
La situación entre ambos bandos estaba totalmente encallada. La entidad puso en marcha la Mesa de Negociación el pasado miércoles, pero no se presentó ningún representante de la plantilla, ya que que exigían una Mesa de Negociación paralela para tratar su situación laboral, completamente distinta los empleados.
Josep Maria Bartomeu en una fotografía de archivo / EFE
No obstante, la dirección rechazó esta propuesta ya que defendieron la necesidad de negociar en una mesa única con trabajadores y futbolistas, para cumplir con los requisitos legales establecidos en el artículo 41.4 de los estatutos de los trabajadores. Al mismo tiempo, Bartomeu acordó con cuatro futbolistas clave (Piqué, De Jong, Lenglet y Ter Stegen) una renovación con las nuevas condiciones económicas adaptadas a la actual situación.
Se negociarán las condiciones por separado en una misma Mesa
Sin embargo, el punto clave reside en que el mismo Estatuto permite la adopción de decisiones de acuerdo con las diferencias presentes en cada colectivo. Un matiz que es el que ha hecho que finalmente los jugadores accedan a sentarse en la Mesa de Negociación, para tratar sus condiciones por separado.
Este mismo viernes, según avanzó la Cadena Ser, los capitanes de Barça y Barça enviaron un burofax al club donde comunicaban que el próximo martes se unirán a la Mesa de Negociación, donde acudirán entre tres y cuatro representantes de los jugadores (incluido el abogado laboralista contratado). Sin embargo, podrían hacerlo a una hora distinta a los empleados.
Josep Maria Bartomeu con Gerard Piqué en una imagen de archivo / EFE
En este documento los futbolistas recalcan que entienden que la junta se ha abierto a llegar a acuerdos individualizados con cada colectivo -trabajadores y futbolistas- algo que ya pedían en sus dos anteriores burofax. Por tanto, finalmente los jugadores accederán a negociar y a encontrar una solución pactada antes de la fecha límite, el 5 de noviembre. Toda la plantilla del primer equipo y del filial estará representada en esta mesa a excepción de los cinco renovados y también de Pjanic y Dest, cuyos contratos ya están adecuados a la nueva realidad salarial.