El FC Barcelona sigue trabajando en la carpeta de salidas. Este miércoles se ha confirmado la tercera del primer equipo. Nelson Semedo abandona el Camp Nou y ficha por el Wolverhampton por 30 millones de euros fijos y 10 en variables. El luso se suma así a Ivan Rakitic y a Arturo Vidal.
En las próximas horas se espera también la salida de Luis Suárez al Atlético de Madrid. Según pudo saber Culemanía, el jugador ya ha acordado una rescisión de contrato con el club, la entidad habría cedido a las presiones y le dejaría salir gratis dirección al Wanda Metropolitano.
Luis Suárez y Messi bromean con Bartomeu en el aeropuerto / AGENCIAS
Luis Suárez y Messi bromean con Bartomeu en el aeropuerto / AGENCIAS
Estas cuatro salidas no se pueden explicar sin la crisis económica del coronavirus, que ha hecho rebajar los ingresos, y la necesidad del área económica de aligerar la masa salarial. En la temporada 2018-19, la última en que tenemos el balance, se registraron 525 millones destinados a los salarios, 387,5 de los cuales al primer equipo.
Con unos ingresos que rondarán esta temporada los 800 millones (tras caer más de 200 millones), el club busca rebajar a 300 o 320 los salarios de la primera plantilla. La salida de estos cuatro futbolistas --Suárez, Vidal, Rakitic y Semedo-- es clave en este sentido. Quienes lleguen --Sergiño Dest y Éric García-- no tendrán fichas tan altas.
60 millones de ahorro
El Barça se ahorrará en salarios, a la larga, unos 80 millones de euros. Luis Suárez es el que más cobraba percibiendo unos 30 millones brutos por temporada mientras que Ivan Rakitic, unos 20. Arturo Vidal también percibía una cifra parecida a la del croata mientras Semedo rondaba los 10 o 12 brutos.
En realidad, los azulgranas no se ahorrarán esa cantidad esta temporada, pues el chileno y el uruguayo saldrán tras haber negociado una rescisión de contrato. El delantero percibiría unos 7,5 millones netos de finiquito, lo que significa 15 brutos por parte del club. Esta temporada solamente se ahorrarían unos 15 millones con el 9.
Parecido es el caso de Arturo Vidal. Los azulgranas lo dejaron salir por unos cuatro millones netos, unos ocho brutos de finiquito. Con los seis que le pagará el Inter de Milán, mantendría así los 10 millones de euros netos que percibía en el Barça la pasada temporada. De los 20 que se le abonaba de salario, la entidad se ahorra doce esta temporada.
Alexis Sánchez y Arturo Vidal en un entrenamiento con el Inter / EFE
Alexis Sánchez y Arturo Vidal en un entrenamiento con el Inter / EFE
Quedan así 80 millones de ahorro en los salarios sin contar las indemnizaciones. Si contamos los finiquitos de Suárez y Vidal, 15 y 8 millones brutos respectivamente, el club se ahorraría poco más que 60 millones de euros. A falta de las entradas, cada vez se está más próximo al objetivo de los 300 en salarios.