A falta de comunicado oficial, Luis Suárez dejará de ser este lunes jugador del FC Barcelona. Ahora sí, el uruguayo habría llegado a un acuerdo con el club y habría aceptado el finiquito que le proponían. No cobrará la totalidad del curso como él habría querido y renunciará a una parte de la ficha a cambio de salir libre.
Como apuntó Culemanía, el delantero había rechazado hace poco un finiquito de siete millones de euros, la mitad de su salario neto: unos 15 millones. Ahora, el acuerdo se cerraría por uno unos 10 kilos y la posibilidad de que salga de manera totalmente gratuita. No se ingresaría nada a cambio de ahorrarse un salario.
Luis Suárez ya tiene decidido cual será su próximo destino. Con la salida a la Juventus de Turín imposible por problemas burocráticos, el favorito ahora es el Atlético de Madrid. Los colchoneros le harían un contrato de dos años y el jugador se garantizaría seguir percibiendo un salario parecido al de Barcelona.
El club reducirá así la masa salarial, una carpeta que preocupa mucho a la junta directiva de Josep Maria Bartomeu. En este sentido, hay varias opiniones dispares entre expertos jurídicos que se preguntan si esta indemnización de 10 millones de euros irá a masa salarial o estará reflejada en otra partida.
Siguiendo los pasos de Xavi e Iniesta
No es la primera vez que el Barça negocia un finiquito millonario para despedir a sus figuras. En los últimos años hemos tenido dos ejemplos de leyendas: Xavi Hernández y Andrés Iniesta. El egarense salió en 2015 del Camp Nou y el club abonó de finiquito, por el año que le quedaba de contrato, unos 10 millones de euros.
Muy parecido fue el caso del manchego. Después de la dolorosa derrota de Roma, cogió rumbo al Vissel Kobe en 2017. También tenía un año más de contrato, hasta verano de 2018, y el club resolvió su situación pagando unos 12 millones de euros y abriéndole las puertas de salida.