La operación salida del FC Barcelona toma forma. Arthur y Rakitic fueron los primeros en marcharse, mientras Arturo Vidal y Luis Suárez no tardarán en hacerlo. El primero tiene un acuerdo prácticamente cerrado con el Inter de Milán y su traspaso podría ser cuestión de horas. El segundo está a un paso de la Juventus.
No es casual que chileno y uruguayo vayan a acabar en la Serie A. No solo es una liga de gran nivel, sino que además Italia goza de una fiscalidad muy apetecible para los futbolistas extranjeros. Se trata de una especie de ley Beckham a la italiana por la que los jugadores nacidos fuera del país pagan menos impuestos que el resto. Y eso ha ayudado a que la limpieza del FC Barcelona fuera más sencilla.
30%
En 2019 el Senado Italiano aprobó el llamado Decreto Crecimiento con el fin de frenar la fuga de cerebros y convertir el país en un destino atractivo para los inversores. También para los propios deportistas de élite. Aunque no entró en vigencia hasta este año, la nueva ley llamó la atención de deportistas como Matthijs de Ligt, que antepuso la Juventus al Barça, Romelu Lukaku o los baloncestistas Sergio Rodríguez y Milos Teodosic.
De Ligt en un partido de la Juventus de Turín / EFE
El decreto en cuestión generó la reducción del 50 al 30% de la base imponible fiscal a los jugadores extranjeros que establezcan su nueva residencia en Italia. La ley beneficia, evidentemente, a los clubes italianos y a los jugadores. Los primeros pueden acordar fichas más altas con los futbolistas. Y los segundos encontrarán más facilidades para cobrar un salario ostentoso en la Serie A que en la Premier o la Liga.
Para poder gozar de estas condiciones fiscales, lo único que deben hacer los deportistas es comprometerse a vivir en Italia durante al menos dos años, haber vivido fuera del país los dos últimos ejercicios fiscales y abonar el 0,5% de la base imponible para el deporte de cantera. Restricciones que, dados los beneficios, son fácilmente aceptables.
Derechos de imagen
No es la única ley que beneficia a los deportistas extranjeros en Italia. En 2018 se aprobó una normativa por la cual los extranjeros que residen en Italia solo tienen que pagar 100.000 euros anuales por los derechos de imagen que generan. No es un porcentaje, sino una cantidad fija que hace aumentar considerablemente los ingresos de los futbolistas.
Cristiano Ronaldo tras la eliminación de la Champions /REDES
El mejor ejemplo es Cristiano Ronaldo. El delantero portugués pasó a percibir solo una porción de sus derechos de imagen en el Real Madrid a perder únicamente 100.000 euros en la Juventus. La diferencia es considerable, sobre todo teniendo en cuenta que el ariete galo ingresa cerca de 80 millones de euros por año solo en derechos de imagen.
Luis Suárez y Arturo Vidal, sin llegar a tanto, también verán crecer las cifras de su cuenta bancaria tras unos meses en Turín y Milán, respectivamente. La ley Beckham a la italiana ha ayudado de forma considerable a que el FC Barcelona pudiera llevar a cabo la limpieza que deseaba hacer.