Salvados por la campana. La junta directiva del FC Barcelona ha evitado el descalabro económico con una operación tan discutible a nivel deportivo como positiva en el apartado monetario, al menos en el más corto de los plazos. El trueque Arthur-Pjanic ha impedido que el Barça cerrara el ejercicio con números rojos, aunque supone incrementar la deuda.

El fichaje del brasileño por la Juventus ya ha sido oficializado por el club azulgrana este lunes. La entidad ingresará 72 millones por el carioca, de los cuáles 2,5 serán para Gremio, que se reservó un porcentaje de la futura venta en 2018. El equipo bianconero, además, podría pagar 10 millones más en función de variables.

Posteriormente se anunció la incorporación de Miralem Pjanic al FC Barcelona al acabar la temporada a cambio de 60 millones de euros más cinco en variables. Con esta operación, la institución culé ha logrado, a priori, cuadrar las cuentas. En caso de no haberlo hecho, ¿qué consecuencias hubiera tenido para la directiva cerrar el ejercicio con números rojos?

Estatutos

Esta posibilidad está contemplada en el artículo 67 de los estatutos de la entidad blaugrana. De acuerdo con el mencionado artículo normativo, en el supuesto que no se puedan lograr beneficios después de impuestos, la junta directiva debe compensar el importe de las pérdidas con el resultado de la gestión de los dos ejercicios posteriores.

Josep Maria Bartomeu en una foto de archivo / EFE

Josep Maria Bartomeu en una foto de archivo / EFE

Un supuesto del que se salvaría, en parte, la junta de Josep Maria Bartomeu, pues los estatutos señalan que si se produce un cambio de junta -que se dará en 2021-, la nueva junta no queda vinculada salvo que el nuevo presidente formara parte de la junta directiva que se había visto afectada por la situación.

Los estatutos determinan también que el incumplimiento de las reglas del artículo 67 supone causa de cese anticipado de la junta directiva, que debe ser sustituida por una Comisión Gestora, con funcionamiento y competencias plenas hasta final de curso.

Avales

Lo que verdaderamente preocupaba a la junta de Bartomeu era lo que explicó Toni Freixa en la Cadena SER a mediados de mayo. El que fuera candidato a la presidencia en 2015 y portavoz con Sandro Rosell señaló que la junta directiva se vería obligada a avalar la diferencia entre el 15% del presupuesto de la temporada 2020-21 y el beneficio acumulado desde 2011, cuando empezó la era Rosell-Bartomeu.

Josep Maria Bartomeu imagen de archivo / EFE

Josep Maria Bartomeu imagen de archivo / EFE

El abogado lo explicó con números para facilitar el entendimiento de la problemática: "En el hipotético caso de 800 millones de presupuesto, el 15% sería de 120 millones de euros. Por lo tanto, si los beneficios acumulados quedan por debajo de estos, se tendría que avalar la diferencia".

El Barça acumulaba 190 millones de euros de beneficios desde 2011 hasta 2019, pero la crisis del coronavirus amenazaba con hacer descender la cifra hasta los 40 'kilos'. Es decir, que con las cifras que dio Toni Freixa en la Cadena SER, los directivos del club azulgrana deberían haber avalado 80 millones de euros. Que hubieran sido más y hubieran podido llegar hasta los 100, teniendo en cuenta que el presupuesto de esta temporada superaba los 1.000 millones de euros. Bartomeu y el resto de la junta directiva se han salvado por la campana.