La FIFA ha puesto en marcha su primera gran medida de ayudas contra el coronavirus. La Federación Internacional de Asociaciones del Fútbol ha emitido un comunicado este viernes donde anuncia la autorización del primer gran pago para paliar la crisis del coronavirus que están sufriendo intensamente los clubes de fútbol.
El organismo que preside Gianni Infantino hará llegar a las federaciones todos los fondos pendientes destinados a cubrir gastos operativos de los años 2019 y 2020. Esto es una suma de 150 millones de dólares que serán repartidos entre las 211 federaciones que la FIFA describe como “los órganos rectores del fútbol de cada país”.
2.460 millones en reservas
Asimismo, en el comunicado se hace especial hincapié en que esta es solo la primera fase de un ambicioso plan de ayudas. Y es que la FIFA tienes reservas de dinero acumuladas en los últimos años por valor de 2.460 millones.
“La pandemia ha provocado dificultades sin precedentes para toda la comunidad futbolística y, como órgano rector mundial, la FIFA tiene el deber de apoyar a aquellos que más lo necesiten”, declara Infantino.
Primera fase de un plan ambicioso
Acto seguido, recalca que el plan de ayudas estará dividido en diversas fases: “Se trata de la primera fase de un plan de apoyo económico de gran alcance que estamos desarrollando para dar respuesta a la situación de emergencia que vive la comunidad futbolística global. En colaboración con nuestros grupos de interés, estamos evaluando las pérdidas y trabajando en los mecanismos de respuesta más adecuados y efectivos a fin de implementarlos en las próximas fases del plan de ayuda”.
En circunstancias normales, las federaciones miembro de la FIFA solo recibirían el total de fondos tras haber cumplido con criterios específicos; sin embargo, en este caso la FIFA los transferirá como una medida de apoyo activo, a fin de salvaguardar el fútbol en todas las federaciones miembro.
500.000 dólares por federación
Esto significa que, en los próximos días, cada federación miembro recibirá 500.000 dólares y los fondos pendientes de pago de 2019 y 2020. Las federaciones miembro deberán emplear esta ayuda económica inmediata para mitigar las consecuencias negativas de la COVID-19 en el fútbol, es decir, para cumplir las obligaciones económicas u operativas que puedan tener respecto a su personal y a terceros.
Las obligaciones y responsabilidades estándar en relación al uso de estos fondos, tal y como se explican en el Reglamento de Forward 2.0, seguirán aplicándose íntegramente y estarán sujetas a las auditorías y los procesos de información financiera estándar.