El coronavirus amenaza con explotar la burbuja en la que vive el mundo del fútbol desde hace años. Con la suspensión de las competiciones y el confinamiento de la población en sus casas, los clubes, tanto españoles como del resto de Europa, ven peligrar los ingresos presupuestados a inicio de curso.

Para paliar la falta de ingresos y, por lo tanto, la posibilidad de cerrar el ejercicio en números rojos, las principales entidades deportivas se han puesto a buscar soluciones. La más popular, como en tantas otras empresas del país, es la realización de un expediente de regulación de empleo temporal. O lo que es lo mismo, un ERTE.

Atlético

El último club en sopesar esta opción ha sido el Atlético de Madrid. El presupuesto de la entidad rojiblanca supera los 500 millones de euros, cifra a la que quizás no llega por la crisis del coronavirus. Miguel Ángel Gil Marín, consejero delegado de la organización, ha formado un Comité de Dirección con los directores generales de todas las área y está analizando como sostener el revés económico actual.

Gil Marín, consejero delegado del Atlético de Madrid / EFE

Gil Marín, consejero delegado del Atlético de Madrid / EFE

Como es evidente, la clave pasa por llegar a un acuerdo con la plantilla y el cuerpo técnico. Como sucede en todos los clubes, amasan gran parte de los gastos. En el caso de los colchoneros, suman 350 millones de euros en sueldos. Gil Marín deberá conversar con ellos y consultar su predisposición a rebajarse el salario.

Los otros empleados de la entidad, por su parte, se verán afectados por el ERTE. El Atlético tratará de complementarlo con una ayuda para acercarse en la medida de lo posible a las nóminas actuales de los trabajadores. Asimismo, aquellas personas que están teletrabajando no se verán perjudicadas por las medidas.

Descartado

El FC Barcelona, en cambio, desestimó la posibilidad de aplicar un ERTE a las primeras de cambio. El club azulgrana ha puesto sobre la mesa la posibilidad de reducir un 70% el salario de la plantilla. Y es que, en el caso de los culés, no solo hay que tener en cuenta los derechos televisivos y el taquillaje, sino también el merchandising y el museo.

Gerard Piqué en una imagen de archivo / EFE

Gerard Piqué en una imagen de archivo / EFE

De acuerdo con los cálculos de la entidad blaugrana, los futbolistas perderían ahora y hasta que se vuelva a la actividad un 70% del salario. Comparado con el total de la temporarada, significaría entre un 10 y un 20% de los emolumentos de los jugadores. Cabe recordar que esta medida no solo salpica al equipo de fútbol, sino a todas las secciones profesionales.

La crisis del coronavirus afecta a todos por igual. Para compensar las pérdidas que sufrirán los clubes por el confinamiento es imprescindible que los futbolistas pongan de su parte.