Era cuestión de tiempo y también lo más lógico. La Liga no se ha librado de las medidas para prevenir el contagio del coronavirus. La patronal pretendía celebrar las dos próximas jornadas a puerta cerrada, y así lo anunció el pasado martes. Pocas horas después, la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) solicitó la suspensión. El miércoles, la RFEF suspendió toda la actividad a excepción de Primera y Segunda.
La reunión de este jueves entre AFE, Federación y Liga parecía encaminada a la suspensión. Y así fue. La Liga decretó el aplazamiento de las jornadas 28 y 29 del campeonato. Por el momento, es la única decisión que se ha tomado, pero Rubiales ya advirtió en una rueda de prensa que la competición podría no finalizar.
Pérdidas
Aunque en estas circunstancias es lo de menos, la inconclusión supondría consecuencias deportivas. Y, sobre todo, provocaría muchas preguntas. ¿Quién sería el campeón? ¿Qué pasaría con los accesos a las competiciones europeas? ¿Y con los ascensos y descensos? Cuestiones a las que la Liga y la RFEF deberían encontrar respuesta.
Bartomeu, en un acto del Barça / FC Barcelona
Bartomeu, en un acto del Barça | FC Barcelona
Más allá de lo que supondría a nivel deportivo, la suspensión total del campeonato también depararía consecuencias económicas. De acuerdo con datos de la Liga, los clubes de Primera y Segunda División dejarían de ganar 678,8 millones de euros. Las 42 entidades deportivas que conforman el fútbol profesional español dejarían de ingresar 549 millones por derechos de televisión, 88 por abonos y 41,4 taquillas.
El impacto no quedaría ahí. Es necesario tener en cuenta que la movilización del fútbol supone una elevada cantidad económica a diferentes negocios del país. De esta forma, los daños por la suspensión total de la Liga no se quedarían en 678,8 millones de euros.
Puerta cerrada
Jugar los partidos a puerta cerrada sería el mal menor. De acuerdo con los datos de la patronal, en caso de haber jugado lo que queda de temporada sin público en las gradas, los clubes de Primera hubieran dejado de ingresar 38,8 millones de euros por taquillas y 78,1 por abonos. Los de Segunda, 2,6 y 9,9 respectivamente.
El Camp Nou vacío / EFE
Bartomeu, en un acto del Barça | FC Barcelona
Las pérdidas se estimaban en 117 millones para Primera División y 12,5 para Segunda. Con la suspensión, los clubes de la categoría de oro dejarían de ingresar 435 millones más por derechos de televisión sobre un total de 1.664. Los de la división de plata, 48 sobre una previsión total de 185.
Como han repetido decenas de organizaciones, entidades y clubes estos últimos días, ahora lo que prima es la salud. El impacto económico y los resultados deportivos quedan en un segundo plano.