Nuevo capítulo de la historia de amor-odio entre Neymar y el Barça. El brasileño, pese a haberse mostrado arrepentido de haber dejado el club y haber demostrado interés durante el último verano en querer volver al conjunto culé y jugar al lado de Messi y sus antiguos compañeros, aprovecha cada instante para buscar una nueva confrontación con la directiva azulgrana.
Y es que el brasileño, según informa El Mundo, ha decidido abrir un nuevo frente judicial contra la cúpula culé. El delantero del Paris Sant Germain ha interpuesto una nueva demanda contra el Barça por el impago de una parte de su salario al abandonar el club azulgrana rumbo a la capital francesa.
Reclama 3,5 millones de euros
Según el citado medio, Neymar reclama al Barça una cantidad que asciende a los 3,5 millones de euros y acusa al club que preside Josep María Bartomeu de haber actuado con "absoluta mala fe" y de "aplicar represalías" por su marcha al PSG, en verano de 2017.
Neymar antes de prestar declaración en un juicio / EFE
En esta denuncia, el brasileño considera que a parte de esta prima, el club le adeuda una parte de su salario que no cobró y que asciende a tres millones de euros. A eso, hay que sumarle unos 100.000 euros que reclama el jugador en concepto de unos bonus que tenía contemplados en su contrato con el Barça.
Segunda demanda contra el Barça
Se trata de la segunda ocasión en que el futbolista brasileño se enfrenta al club azulgrana a nivel judicial. La primera tuvo lugar en septiembre de 2019, cuando Neymar denunció al Barça por una millonaria prima de renovación que dejó de cobrar al marcharse a Francia, en el que exigía una cantidad bruta de 43,6 millones de euros (ya percibió una primera parte, que ascendía a 20,7 millones).
Las dos partes no llegaron a un acuerdo. El futbolista nunca se ofreció a renunciar a los 43 millones, sino que tan solo aceptaban demorar el pago siempre que el Barça se comprometiese a dar una garantía de que acabaría pagando la totalidad del importe. Así, el brasileño exigía al club por escrito que se comprometieran a ficharle de vuelta, algo a lo que no accedieron los culés.
Un fichaje que no tiene sentido
Finalmente, tuvo lugar el juicio donde no participó Neymar. Un litigio que cayó ligeramente a favor de los abogados del club catalán, que desmontaron gran parte de la defensa del jugador. Sin embargo, la principal baza del clan brasileño sigue siendo, sin duda, el redactado de los contratos. Ambas partes ahora siguen a la espera de la sentencia del juez.
Por tanto, se trata de un nuevo conflicto que podría acabar de dar por muerta la llegada de Neymar en un futuro próximo al Camp Nou. Un hecho que ya se preveía prácticamente imposible, y que se convierte en una auténtica quimera tras la actitud del futbolista a nivel judicial contra el club.