Hegemonía absoluta también en términos económicos. La Liga publicó este lunes los límites salariales de los 20 equipos de Primera División, que alcanzan un valor total de 2.938 millones de euros, en el que el FC Barcelona vuelve a colocarse en primera posición. Es, efectivamente, el club que mejor paga a sus jugadores. Por encima del Real Madrid, segundo aunque recortando diferencias, y el Atlético de Madrid, tercero y con un presupuesto de casi la mitad.
Ningún futbolista de toda Europa cobra mejor que un azulgrana --en términos porcentuales--, una prioridad absoluta para la junta directiva que lidera Josep Maria Bartomeu. Una superioridad económica que responde a unos ingresos récord a nivel mundial --es el club que más factura del mundo-- y a una política interna clara: Traer a los mejores y mantener a los que ya están.
Tras firmar un pasado ejercicio histórico, en el que se quedaron a tan solo 10 millones de euros de llegar a los 1.000 en ingresos, el club azulgrana tendrá este curso un presupuesto de alrededor de 1.060 millones de euros, que presentará Enrique Tombas en la Asamblea de Compromisarios del próximo 6 de octubre. Un aumento dadas las previsiones de ingresos y que, por tanto, permite al club aumentar su cota en la masa salarial. De los 632,791 millones de euros que tenía disponibles para pagar las fichas de los futbolistas del primer equipo, filial, femenino, secciones, así como los staffs técnicos y otras esferas del club la temporada pasada, ahora podrá alcanzar los 671,429 millones. Un aumento de 30 'kilos' dada la liquidez de la entidad, aunque sin la obligación de ser utilizada.
Mayor margen
Una vez más la entidad presidida por Javier Tebas aprobó los presupuestos que presentó el club catalán a través del Órgano de Validación de la Liga para garantizar la estabilidad financiera del club. Unos gastos que se miden en torno a distintas variables y factores que el Barça cumple a la perfección y que aseguran también a la competición española una viabilidad económica.
Un techo del gasto que en los últimos años se ha mirado con lupa a través de un control exhaustivo por parte de la Liga, y que también acompaña la UEFA con el control del Fair Play Financiero. Todo para convertir y mantener el fútbol como un deporte más justo.
¿Cómo se calcula el tope del gasto?
Para saber que techo de gasto tienen los distintos equipos la Liga utiliza la información que presentan los clubs. Presupuestos estimados y con background de las últimas tres temporadas que se consiguen tras analizar a través de distintos criterios que se resumen en una operación matemática. Restar a los ingresos totales la cantidad que el club gastó en parcelas no deportivas. Es decir, restar los gastos ajenos a la actividad profesional del club al presupuesto general.
El punto inicial para corroborar esas cifras parte de los ingresos totales del club que, en este caso, podrían ser los 990 millones que ingresó el Barça la temporada pasada. Unos ingresos que se obtienen a través de las competiciones en las que participa --Liga, Copa y Champions-- los patrocinios, los derechos televisivos, las cuotas de abonados y socios, las entradas, la explotación de instalaciones y tiendas, etc. A este cómputo global, también se le añaden los ingresos obtenidos por la venta de jugadores aunque la Liga no lo considera estrictamente un bien de la entidad.
Una foto de Josep Maria Bartomeu, presidente del Barça / EFE
A partir de la cantidad total que nace de la suma de todos los ingresos, se descuentan todos los gastos que no tienen nada que ver con la plantilla. La compra de jugadores, los gastos de la plantilla no deportiva, (sus salarios, indemnizaciones, cuotas de la Seguridad Social, etc), los de explotación (servicios, pago de impuestos, viajes...), variaciones negativas en las existencias y provisiones. Una vez finalizado el cálculo, la cifra final será la que determine cuál es el techo de la masa salarial que cada club puede alcanzar esa temporada. Aunque, eso sí, sin la necesidad de gastarlo todo o llegar a ese límite.
De hecho, algunos clubs, si lo consideran oportuno, pueden reducir su masa salarial pese a que su capacidad económica sea mayor. Así pues y con una expectativa de crecimiento económico mayor a la de la pasada campaña, el club catalán podría aumentar su gasto deportivo hasta 30 millones esta temporada. Una cifra fija que contempla algunos cambios. El club que lo desee puede pedir una amplicación de este tope si obtienen nuevos ingresos --y los demuestran-- a través de nuevos patrocinios, el aumento en los ingresos televisivos o incluso por lesiones de larga duración que obliguen al club a acudir al mercado.