La junta directiva del FC Barcelona ha vivido muchos y sonados cambios en la composición de sus miembros. Diferencias personales o asuntos profesionales han obligado a los distintos dirigentes a poner punto y final a su carrera como directivos azulgranas antes de tiempo, de forma inesperada o antes del fin del mandato por el que se comprometieron.
De la junta directiva actual, que salió elegida en 2015 después de que Josep Maria Bartomeu ganara las elecciones a la presidencia, se ausentan algunas de los rostros más conocidos por el barcelonismo y que iniciaron el nuevo proyecto del club catalán junto al presidente. La foto actual es muy distinta a la que presentó Josep Maria Bartomeu en su fotografía de equipo, pero sin duda, la figura del vicepresidente ha sido una de las más inestables durante su mandato.
La repentina dimisión de Jordi Mestre, hasta ahora vicepresidente del área deportiva del Barça, es la última baja que presenta el equipo del presidente. Un cargo de gran importancia dentro de la junta y que ostentaba hasta ahora una de las voces con más fuerza dentro de la directiva y, además, un amigo íntimo de Barto. Una decisión imprevista, pero que rondaba la cabeza del empresario hotelero desde hacía meses dadas las constantes discrepancias entre algunos miembros de la junta directiva, especialmente en materia deportiva. Nombres como Ernesto Valverde, Pep Segura, Luis Suárez, Griezmann, Neymar o De Ligt han protagonizado numerosas batallas dialécticas en la cúpula del club. Unas diferencias que enfrentaron durante meses a Mestre con Javier Bordas, Silvio Elías y Xavier Vilajoana y que han terminado con el vicepresidente dimitiendo de forma "irrevocable".
El último, pero no el primero
Mestre es el último de una lista que ya tiene más nombre que años del mandato de Bartomeu. En su cuarto año como presidente del Barça, Bartomeu ha visto salir por la puerta hasta cinco vicepresidentes de distintas áreas. Mestre heredó el cargo que ostentaba hasta 2014 Bartomeu --un puesto que volverá a ocupar ahora-- pero antes salieron otras figuras muy poderosas dentro de la junta.
El primero fue Javier Faus, quien fue vicepresidente económico y estratégico durante el mandato de Rosell y durante el de Bartomeu antes de las elecciones. Uno de los hombres fuertes de la junta y que consiguió reducir la deuda del club, así como expandir la marca azulgrana internacionalmente y poder asumir económicamente los fichajes de Neymar Jr. y Luis Suárez. Un varapalo inesperado, que dejó a Bartomeu sin uno de sus hombres de máxima confianza y de mayor competitividad dentro de la junta. Faus no dimitió, pero comunicó al presidente su deseo de no continuar en la junta meses antes de celebrar las elecciones pese a que éstas proclamaran vencedor al actual mandatario azulgrana.
El adiós de Faus, fue el preludio de distintas despedidas ordenadas en un periodo de tiempo relativamente corto. Susana Monje heredó el cargo de Javier Faus tras ser la tesorera del club y convertirse en la primera mujer en acceder a una vicepresidencia del club. En noviembre de 2016 anunció su dimisión por la que alegó motivos personales: "Es una decisión que venía meditando hace unos meses, pero quería dejar que pasar la asamblea y no dejar ningún cabo suelto". Una decisión difícil e incomprendida ya que llegó a superar, con creces, las cifras de beneficios que presentó su predecesor.
Salidas polémicas
Sin Faus ni Monje en la junta, llegaron tiempos más inestables a nivel institucional para el club. Carles Vilarrubí anunció su dimisión el 2 de octubre de 2017. Hasta el entones vicepresidente de las relaciones institucionales del club antepuso su pensamiento político al club y alegó profundas y enormes discrepancias con otros miembros de la junta tras la postura que tomó el club respecto a los hechos ocurridos el 1-O en Cataluña y que no convencieron a parte de la junta para suspender el Barça-Las Palmas de Liga ese mismo día.
El último hasta este miércoles, era Manel Arroyo, responsable del área de marketing y comunicación, quien decidió salir de la junta el 16 de julio de 2018 por sus compromisos profesionales con su empresa Dorna, vinculada al motociclismo. Un total de cinco vicepresidentes que dejaronn a Bartomeu sin personalidades de confianza en la junta. Ahora, como ya pasó anteriormente, el presidente asumirá la vicepresidencia del área deportiva al menos hasta terminar el mercado de verano.
A ellos se suma el adiós del directivo Jordi Monés, quien junto a Vilarrubí, no aceptó la posición del club el 1 de octubre del 2017, por no querer suspender el Barcelona-Las Palmas tras los hechos acontecidos en aquella jornada.
En el texto remitido a los medios, el Barcelona informó que "Jordi Mestre, hasta hoy vicepresidente deportivo, ha presentado esta tarde su dimisión irrevocable. Jordi Mestre ha formado parte de la Junta Directiva del club desde el verano de 2010, cuando bajo la presidencia de Sandro Rosell fue nombrado directivo responsable del futbol formativo, del Barcelona B y del Barcelona Femenino. Desde enero de 2014 ha sido el vicepresidente responsable del área deportiva, cargo que mantuvo tras las elecciones del 18 de julio de 2015".
"Jordi Mestre quiere agradecer la confianza depositada en él por los presidentes Sandro Rosell y Josep Maria Bartomeu, y la oportunidad y el honor de haber servido y defendido los intereses del Barcelona", concluye el comunicado.