Fue un caso casi eterno, especialmente para Sandro Rosell. El expresidente azulgrana estuvo en prisión provisional durante casi dos años acusado de blanqueo de capitales y pertenencia a grupo criminal que, supuestamente, ocultó casi 20 millones de euros de las comisiones ilegales que obtenía del fuera presidente de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF), Ricardo Teixeira. Acusaciones de las que finalmente acabó absuelto.

634 días difíciles en los que la justicia española, concretamente la juez Carmen Lamela, rechazó sistemáticamente las fianzas que la familia del exmandatario azulgrana puso sobre la mesa para sacarle de la cárcel. Se alegó un riesgo elevado de fuga, pero la justicia finalmente cayó del lado de Rosell. Tras la celebración del juicio, la sala entendio que las pruebas aportadas no pudieron acreditar las acusaciones y, por tanto, se primó el principio in dubio pro reo (en caso duda falla a favor del acusado).

Apoyo incondicional

Su juicio fue uno de los más seguidos en los medios de comunicación y en las redes sociales. Un seguimiento que demostró la afinidad del barcelonismo con la causa de Rosell --quien salió forzosamente del palco del Camp Nou por dichas acusaciones-- antes y posteriormente de la sentencia final. 

Así lo refleja el estudio que el club catalán publicó este martes sobre el comportamiento de las conversaciones digitales entorno a la entidad azulgrana, al margen de sus propias redes sociales. Con el presidente en prisión preventiva los intervenciones digitales eran más esporádicas. 

Sandro Rosell, junto a su esposa, Marta (d), y otros familiares, tras salir de la cárcel después de 21 meses en prisión preventiva. In dubio pro reo / EFE

Sandro Rosell, junto a su esposa, Marta (d), y otros familiares, tras salir de la cárcel después de 21 meses en prisión preventiva. In dubio pro reo / EFE

Una situación que cambió radicalmente en febrero de 2019 cuando se inició el juicio. Aumentaron las conversaciones por el caso, especialmente el de las cuentas de apoyo al expresidente. Las conversaciones se dividieron en dos bandos: los pro Rosell y su inocencia y una minoría que le señalaba como culpable.  De todas ellas, destaca que un 87% del contenido era en tono favofable a Rosell, especialmente, hacia las críticas por mantenerle en prisión preventiva. 

Absuelto

Dos meses después, en abril, la Sala comunicó la absolución del expresidente azulgrana al no poder probar las acusaciones. Una sentencia que redució los tuits críticos con Rosell a un 0,3%. Asimismo, destacan también hubo un aumento considerable en críticas directas a la justicia española --con un aumento del 71%-- y a la juez Lamela quien recibió un 11% más de comentarios negativos las redes sociales. 

Asimismo, y muy similar a lo que ocurrió tras la debalce de Anfield, la cantidad de usuarios anómalos, como boots tenían generaban el 11% de la actividad al inicio del juicio. Un contenido que cayó en picado tras su absolución a tan solo solo un 1%. Una cifra a tener en cuenta y que da de nuevo la razón al club entorno a la peligrosidad del contenido que se mueve, con unos intereses definidos, en las plataformas digitales.