El FC Barcelona sigue ampliando sus fronteras y el pasado agosto se convirtió en el primer club en acudir a fondos de inversión norteamericanos para conseguir préstamos. La cifra ascendió hasta los 140 millones de euros, según informó El País este lunes 11 de febrero. La entidad catalana no ha tenido que presentar ningún tipo de garantía por si no se cumplen los compromisos de pago.
Desde el club azulgrana aseguraron al rotativo madrileño que el FC Barcelona no tiene ninguna necesidad de hacer caja, pues según argumentan ya son seis los ejercicios consecutivos ganando dinero. Pero este endeudamiento dará alivio al club cuando necesite abordar ciertos fichajes. Además, devolver este dinero será muy cómodo para la organización, pues no tendrán que hacerlo hasta dentro de cinco años. Los intereses se podrían situar en torno al 1,8%, aunque desde el club aseguraron al medio del grupo Prisa que la tasa es aún menor.
Una cifra que debía ser mayor
Las dos entidades que dejaron dinero al club son Barings y Pricoa Capital Group, que forma parte del asegurador americano Prudential. Barings dejó al club 50 millones de euros, y Pricoa 90, aunque lo previsto era que la cifra se enfilase hasta los 130 millones de euros.
Lo impidió la asamblea de compromisarios del club que se celebró el pasado mes de octubre. La Junta Directiva pretendía suprimir un artículo de los estatutos que señala que el total de la deuda debe limitarse al 10% del presupuesto de la institución, cuyos ingresos la última campaña fueron de 914 millones de euros.
Josep Maria Bartomeu durante la última Asamblea de Compromisarios / EFE
La gran mayoría de estos van destinados a los salarios de los futbolistas. El Barça es el equipo que dedica más cantidad de dinero a su masa salarial: se convirtió en el primer club en superar los 500 millones de euros en sueldos de jugadores.
No será para el Espai Barça
Así lo señalaron fuentes del club a El País. El Espai Barça es uno de los proyectos más poderosos de la directiva actual, con el que se pretende remodelar y ampliar el Camp Nou y también reformar los alrededores al completo del feudo azulgrana. Se financiará con un concurso de banca nacional e internacional, aunque la directiva azulgrana cree que el peso de la entidad que gane será muy inferior al que se preveía al principio.
Imagen de la maqueta del Espai Barça / EFE
El coste total del Espai Barça se calcula en unos 600 millones de euros, que se financiarían en tres partes iguales: un tercio llegaría de la marca que le ponga nombre al nuevo feudo azulgrana, otro de los beneficios que genere el proyecto en sí y la tercera parte, de la financiación bancaria. Ahora se cree que entre la entidad que renombre al estadio y los recursos que se generen se podría pagar la totalidad del proyecto.
Desde el club, siempre según lo que señala El País, son optimistas con la realización de este proyecto, que finalizaría en 2023 cuando debería acabar en 2022. El Espai Barça comprende, aparte del feudo azulgrana, la construcción de un nuevo pabellón polideportivo y un estadio que reemplace el Miniestadi y que previsiblemente debería llevar el nombre de Estadio Johan Cruyff.