Xavier Vilajoana lo tiene claro: el futuro del club pasa por la apuesta en la Masía para nutrir al primer equipo. El modelo es intocable, y aunque también defiende las incorporaciones de grandes estrellas, cree firmemente en el proyecto deportivo de la cantera que tantos frutos ha dado a la entidad catalana a lo largo de los años.
De sangre azulgrana por costumbre familiar, su padre, Lluís Vilajoana, fue directivo del club durante el mandato de José Luis Núñez. Pasó brevemente por el Barça (2003-05) para hacerse cargo de la profesionalización de la sección de Fútbol Sala y regresó a la comisión deportiva del club (no remunerada) de 2010 hasta 2015, cuando Josep Maria Bartomeu lo incorporó a la junta directiva como responsable del fútbol formativo amateur.
Conoce la casa
Antes de llegar a los despachos, Vilajoana también vivió años de gloria vestido de corto. Procedente de la cantera del CF Damm, jugó en el Juvenil Sub-19 y el Barça C durante los años 1991 a 1994 junto a De la Peña, Jordi Cruyff o Sergi Barjuán, y tras abandonar el club regresó en 1997 para incorporarse al primer equipo de fútbol sala.
Hotelero de profesión y con cuatro carreras, el empresario y CEO del Grupo Euroconstruc se encarga de los equipos cadetes y juveniles, labor en el club que depende del vicepresidente deportivo, Jordi Mestre. Pese a que entró en el Barça de la mano de Joan Laporta, puso fin a su papel tras la primera gran crisis de aquella mítica junta directiva y volvió con Sandro Rosell en 2010 para mantener su puesto con Bartomeu. Es un hombre de club, pero su vida empresarial le permite vivir a parte y su cargo se sostiene por la experiencia propia adquirida en su etapa cadete y juvenil cuando empezó a conocer el estilo gracias a Laureano Ruiz y más tarde de la mano de Johan Cruyff. El fútbol es su materia predilecta.
Paciencia con Dembelé
Unos conocimientos que invitan al optimismo para las jóvenes promesas del club catalán. En una entrevista concedida para RAC1, en el programa Tu Diràs, Vilajoana no escondió, como siempre, su apuesta sólida por la cantera. Con el caso Dembelé, hace escasas semanas, en pleno auge por sus constantes retrasos y faltas a los entrenamientos, el vocal del club destacó las cualidades del francés para mantener el discurso institucional el club.
"Creo que es un jugador que nos dará mucho. Ya nos lo está dando. Hoy en día, tiene un talento muy difícil de encontrar en otro jugador. Sinceramente, en los años que llevo en el mundo fútbol... él tiene una característica especial, aparte de la velocidad, y es el hecho de dominar las dos piernas con tanta indiferencia. Es algo muy difícil de encontrar, es una calidad técnica que desequilibra muchísimo, porque los defensores rivales no pueden darle un lado malo. Él no lo tiene".
Dembelé celebra su gol frente al Tottenham / EFE
Pese a sus innegables cualidades futbolísticas, el ejemplo que puede dar a otros jóvenes en una evidente falta de profesionalidad es contradictorio, pero le quitó hierro al asunto. "A ver, generalizar y decir tema de actitud... Al final, estas cosas pueden pasar. Para mí, una actitud es algo que se hace crónico, que se hace habitual" y añadió: "Es un chico joven, que acaba, entre comillas, de llegar. Debe adaptarse a un gran equipo, como el Barça, con las repercusiones que conlleva. Hay gente que es más madura, a ciertas edades, y otros que quizás lo son menos. Yo daría tiempo. De momento, el rendimiento en el campo creemos que es bueno".
Cantera siempre
Tampoco evitó los elogios para otras futuras promesas procedentes y cocidas a fuego lento en la cantera. Carles Aleñá tiene futuro y considera que la lesión en pretemporada le ha hecho más fuerte. Con Riqui Puig pidió calma y tiempo, además de protección que sin duda, Vilajoana y la directiva azulgrana le darán.