El próximo 25 de febrero Sandro Rosell será juzgado en la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional por un supuesto delito de blanqueo de capital. Concretamente 20 millones de euros procedentes de la Confederación Brasileña de Fútbol y de los cuales se habría quedado 6,5 millones. Por este delito la Fiscalía solicita 11 años de prisión.
Hasta el momento, Sandro Rosell se encuentra en prisión preventiva para prevenir una posible salida del país. Pese a ello, se ha solicitado en varias ocasiones su puesta en libertad hasta la fecha en que se realice el juicio y se le declare culpable o inocente. De ahí a que el expresidente del Barça volviera a solicitar el poder salir de la cárcel con tal de poder preparar su defensa de cara a su juicio.
Petición de Rosell denegada
Sin embargo, y pese a que parecía que podría ser puesto en libertad, la Cadena SER ha informado que la Fiscalía se opone a que Sandro Rosell abandone la cárcel a base del argumento del riesgo de fuga. Los abogados del ex presidente azulgrana aseguran que este hecho es “injustificable” y que una posible fuga del país es “inverosímil”.
Para ello, los letrados de Rosell alegan que que su arraigo familiar es muy fuerte y que sólo podría refugiarse en países que no tengan con convenios de extradición con España, añadiendo que éstos “no forman parte del primer mundo, sino todo lo contrario”. Así aluden a que fugarse del país no le garantiza ningún bienestar, además de que su deseo es el de preparar su defensa y exponer su inocencia el día del juicio.
Rosell tiene el apoyo de Bartomeu
El actual presidente del Barça se pronunció sobre el tema, antes de saberse la decisión de la Fiscalía, tanto en la Asamblea de Compromisarios del pasado sábado 20 como en una entrevista en Catalunya Ràdio. “El caso de Sandro Rosell no lo entendemos”, ha comentado Josep Maria Bartomeu, dejando al aire que es una situación extraña, pues la fecha del juicio ya se conoce y aún sigue, aunque de forma preventiva, en prisión.