El Juzgado de Instrucción número 28 de Barcelona ha dado por zanjado el caso Abidal. Tras concluir que no han aparecido nuevos indicios de delito que justifiquen la reactivación del procedimiento, la jueza ha decidido rechazar la reapertura de un asunto muy escabroso que ha traído cola en los últimos meses.
Una resolución sorprendente porque va en contra de lo que habían solicitado la Fiscalía y la Abogacía del Estado en representación de la Organización Nacional de Trasplantes (ONT). Ambos organismos pidieron a la jueza que autorizara la práctica de nuevas diligencias para tratar de dilucidar si pudieron cometerse irregularidades en el proceso de donación de un hígado al exjugador Eric Abidal, actual secretario técnico del FC Barcelona.
La jueza ha terminado asumiendo la tesis del expresidente Sandro Rosell, que pidió personarse en la causa el pasado julio tras desvelar El Confidencial que existían cuatro llamadas en las que el propio exdirigente y su antigua mano derecha en el club, Juanjo Castillo, admitían implícitamente la "compra de un hígado ilegal" para Abidal y haberse inventado que el donante era "un primo" del entonces lateral izquierdo del equipo.
Juanjo Castillo prendió la mecha
Cabe recordar que las afirmaciones eran todas obra de Castillo y Sandro se limitaba a asentir, sin dar detalles, durante una conversación telefónica que se prolongó por más de dos minutos.
La Audiencia Nacional abrió una pieza separada con las conversaciones al considerar que desvelaban un presunto delito de tráfico de órganos y las remitió al Juzgado 28 de Barcelona. Sin embargo, la titular de esa plaza decidió archivar provisionalmente las pesquisas el pasado abril sin realizar apenas averiguaciones. Una comisión rogatoria remitida a Francia, país de residencia del supuesto primo de Abidal, fue rechazada porque el tráfico de órganos no está recogido en el ordenamiento galo.
Las llamadas llevaron a reabrir el 'caso Abidal'
Tras la publicación de las llamadas de Rosell y Castillo, la Fiscalía pidió la reapertura de la causa. En concreto, alegó que la jueza del Registro Civil que supervisó la donación había encontrado discrepancias entre los documentos que ella misma validó y los que tenía en su poder el Hospital Clínic de Barcelona, el lugar en el que se produjo la intervención.
Además de reclamar el reinicio de la instrucción, el Ministerio Público también propuso nuevas diligencias probatorias. Que se tomara declaración en calidad de testigo a Gerard Armand, el supuesto donante y primo de Abidal, y que se le practicara una análisis forense para confirmar que había cedido una parte de su hígado al entonces futbolista.
Llegar al fondo del asunto
La ONT, a través de la Abogacía del Estado, se sumó posteriormente a la solicitud de la Fiscalía para intentar llegar hasta el fondo del asunto y despejar las dudas sobre la irregularidad del proceso. El organismo había realizado previamente una investigación interna sin encontrar irregularidades, pero advirtió de que sus competencias se limitaban al ámbito administrativo y no tenía la capacidad necesaria para confirmar la veracidad de los documentos del expediente ni para descartar que el donante hubiera recibido a cambio algún tipo de contraprestación económica.
Una foto de Éric Abidal junto a su primo en el hospital antes de la donación de hígado
Finalmente, la jueza ha rechazado las peticiones de la Fiscalía y la ONT y ha resuelto que no procede la repertura de la causa al no haberse encontrado nuevos indicios delictivos que permitan revertir el sobreseimiento provisional decretado ya en abril.
La sentencia no es firme
Ese fue uno de los argumentos que utilizaron los abogados del expresidente del Barça para pedir en agosto el cierre definitivo de la causa. También alegaron que la difusión de las conversaciones no era un motivo suficiente para ponerla de nuevo en marcha y aseguraron que la jueza del Registro Civil se retractó de su denuncia sólo unos días después de presentarla.
La jueza ha terminado dando la razón a Rosell. Con todo, la decisión no es firme. Las partes pueden recurrirla ante las instancias superiores.