Hansi Flick, satisfecho con la victoria del Barça ante Osasuna EFE
Después de la debacle de Stamford Bridge, y tras la vuelta de Pedri y Raphinha de lesión, el Barça de Hansi Flick no sólo ha conseguido victorias importantes, sino que ha recuperado la verticalidad, su garra y su descaro, lo que fue la pasada temporada, su seña de identidad.
Los blaugranas se han impuesto en Liga a Atlético, Alavés, Betis y Osasuna, y en Champions al Eintracht de Frankfurt, en partidos donde los de Flick han demostrado pegada y ese estilo
desenfadado y vertical, por el que se dirigen a portería sin cesar, así como también, capacidad
de sacrificio, perseverancia y paciencia.
Seguramente todavía estén un poco lejos de lo que sería el mejor nivel de este equipo, pero la vuelta de Raphinha y Pedri nos ha permitido volver a disfrutar del juego de este Barça, al que le sigue sobrando encajar demasiados goles, muchos de ellos de forma demasiado temprana, aunque Joan Garcia se haya erigido como el portero que este equipo necesitaba.
Pese a que quedan deberes pendientes, el equipo sigue demostrando que tienes ganas y hambre de seguir ganando y sumando títulos al palmarés blaugrana, confiando en un Hansi Flick que sigue siendo clave para desencallar los partidos desde el banquillo, y habiendo aprendido a sufrir en algunos partidos hasta dar con la tecla o sumar los tres puntos.
No en vano, el Barça es líder, a más de un partido de distancia del Real Madrid y sigue luchando para entrar en el top-8 de la Champions, un objetivo difícil pero no imposible, para el que los blaugranas deberán superar al Slavia de Praga y al Copenhague por una distancia importante de goles y esperar que el resto de los resultados acompañen.
Resulta también importante mencionar que, después el lamentable espectáculo que dieron los aficionados del Eintracht de Frankfurt, el club debería plantarse ante algunas aficiones que sólo tienen por objetivo destrozar las gradas del estadio que visitan y sembrar el caos, aunque ello comporte una sanción por parte de la UEFA, que es justamente el estamento que debería sancionar actitudes como las vividas en el Camp Nou en Champions, donde realmente se pone en riesgo la integridad física de las personas.
En este momento de la temporada el vaso se puede ver medio lleno o medio vacío, pues se han recuperado buenas sensaciones, pero queda también un camino para recorrer para volver a ser el Barça de la pasada temporada, que fue candidato a todo.
Haber recuperado efectivos como Raphinha o Pedri ha resultado absolutamente clave para que el Barça sea hoy líder de la Liga y con claros síntomas de mejora, jugadores diferenciales que son esenciales en este equipo, con un Pedri que ejerce como faro del conjunto de Flick y con un Raphinha al que sienta de maravilla el brazalete de capitán, empujando al equipo y a la afición hasta la victoria y generando ocasiones que aprovecha todo el conjunto.
Evidentemente en el Barça nunca es suficiente y menos en lo que respecta al nivel de juego, pero siempre es mejor seguir mejorando siendo líderes en la Liga y sumando en Champions que en otro tipo de situaciones, que no permitirían crecer a unos jugadores que siguen siendo muy jóvenes.
Porque, aunque todavía falte para alcanzar el nivel del año pasado, el conjunto de Flick vuelve a ser reconocible, recuperando sensaciones y convirtiendo el Camp Nou en un auténtico fortín con 5 victorias en 5 partidos y un liderato con el que seguro que pasaremos unas felices vacaciones de Navidad.