Han pasado 909 días desde que el Barça se despidió del Camp Nou para el inicio de su completa remodelación, y aunque todavía no ha terminado, podemos decir, sin ningún tipo de duda, que hemos vuelto a casa.
Como si de la noche de reyes se tratara o el primer día de colegio en un centro nuevo, el barcelonismo vivió esta gran cita con la historia de una forma muy especial, inmortalizando cada momento y mirando a todos lados como el que acaba de aterrizar a una ciudad que no conoce de nada, captando cada momento del que será la nueva casa de las nuevas generaciones de culers.
El estreno no podía ser mejor, un ambiente estelar, conciertos, el Cant del Barça interpretado por el Cor Jove de l’Orfeó Català con pirotécnica levantaban el telón de un día que la afición llevaba esperando desde mayo de 2023, cuando hicimos las maletas a Montjuïc, y de donde debíamos haber vuelto ya hace uno año para el 125 aniversario del Club.
El nuevo Spotify Camp Nou promete y mucho, un estadio que a medio acabar ya impone y donde ya se han podido ver las grandes mejoras, tales como los videomarcadores, el juego de luces, los nuevos accesos y pasillos y la proximidad con los jugadores que no tenía el estadio olímpico, aparte de que, con una tercera gradería simétrica, la sensación de olla a presión y de estadio que impone es mucho mayor que con el antiguo estadio.
El 22 de noviembre de 2025 quedará en la memoria de la historia del Barça, el día en el que regresamos al Camp Nou, lo que llamamos casa, aquel estadio que se inauguró el 1957 gracias al esfuerzo de los socios blaugranas, que fue remodelado en 1981, en 1994 y nuevamente en la actualidad, un sitio especial para los culers, ya que en pleno corazón de Barcelona y junto con otras instalaciones del club, debe ser la pieza angular del nuevo Barça del siglo XXI.
Todos recordamos aquella primera vez en la que entramos al Camp Nou, de pequeños, acompañados por familiares cercanos y como de espectacular se veía aquel verde y el ambiente de un estadio tan grande. No todos los clubs del mundo ni todos los aficionados pueden tener una segunda primera vez en su estadio como pasará con el nuevo Spotify Camp Nou, pues al margen de recordar aquella primera vez de pequeños ahora recordaremos la segunda primera vez tras la remodelación y con otra edad.
Y no hay nada mejor para volver a casa que una goleada al Athletic Club que devolvía el liderato de la Liga a los de Flick, un resultado que se sumaba a una fiesta que empezó horas antes y terminó con el fantástico juego de luces con el himno y unos fuegos artificiales que dejaron claro que el 22 de noviembre de 2025 ha sido un día muy especial.
Visto que ya ahora el Spotify Camp Nou es un estadio espectacular estando a medias, es imposible no soñar en como quedará al finalizar, e incluso en como debe ser la gran inauguración que merece cuando esté todo finalizado.
Seguramente habrá cosas a mejorar, como la distancia entre asientos, o las escaleras de acceso a las graderías, irregulares y asimétricas, pero no podemos olvidar que de momento tocará convivir entre goles y grúas, disfrutando estos momentos especiales en los que, aparte de ver al conjunto de Flick, también veremos desde dentro el avance de las obras.
Porque 909 días después hemos vuelto a casa, en un día que queda ya para la historia, y que principalmente, ha servido para ver que el barcelonismo sigue muy vivo y que dentro de no mucho, aunque seguro que, con retraso, estaremos jugando en el mejor estadio del mundo.
Este día debe ser para todos aquellos socios de edades avanzada, que se emocionaron con el saque de honor realizado por el socio de mayor edad del club, y para todos aquellos que aguantaron el exilio en Montjuïc, que se quedaron en el barco cuando parecía que se hundía mientras aparecían otras opciones más de moda y no dejaron de creer nunca; por la Masía, un sentimiento y unos valores que trascienden lo deportivo y convierten al Barça en un club único en el mundo que se transmiten de generación en generación.
Un club especial e irrepetible, con un estadio único, ¡Bienvenidos a casa Culers!
