Tenemos información que nos llega en cuentagotas porque el tema es muy delicado. El mismo Hansi Flick pidió el domingo, después del partido contra el Villarreal, no precipitarse con las especulaciones. Pero el tiempo aprieta y algunas deducciones ya podemos avanzar.
El primero en dar el pésame futbolísticamente hablando a Ter Stegen a través de la red social X, fue el mismísimo Pau Gasol. A partir de aquí, una infinidad de grandes jugadores se han sumado como un tsunami para apoyar al alemán. Todos los que son profesionales de élite sabían, tan solo viendo las imágenes, que aquello era muy serio. No hacía falta tener un resultado final. A partir de aquí, una cosa es evidente: no es lo mismo lesionarse con 32 años, la edad de Ter Stegen, que con 19, la edad de Gavi.
El tema es tan sencillo como pensar que, ciertas lesiones y, a partir de según qué edad, no permiten volver a ser el mismo. Y más aún, si la lesión en cuestión se produce en un punto clave ya tocado anteriormente. Ter Stegen ha sido decisivo en la portería, igual que lo fue Messi en la delantera. Jugadores decisivos son aquellos que te salvan partidos y con este, en concreto, ya no se podrá contar a partir de ahora.
La otra cara de la moneda es Iñaki Peña. Las comparaciones son horrorosas, pero es conveniente hacerla en este caso. A los 22 años, Ter Stegen protagonizó su primera temporada con el Barcelona y a los 24, ya se atrevió a marcar un pulso al mismo club y postularse ante Claudio Bravo para ser titularísimo en todas las competiciones, Liga y Champions. Ahora, Iñaki Peña se planta con 25 años como el suplente que debe salvaguardar la portería azulgrana.
Por edad, aunque un portero siempre tenga una carrera más prolongada, lo puede coger tranquilamente. Pero asumir tal responsabilidad le queda demasiado grande por una cuestión de inmadurez del propio jugador. Puede dar destellos de esperanza en los primeros partidos, pero aguantar una temporada con esta presión, a día de hoy, no es factible. Y en el mismo club lo ven así y saben que deben trabajar en soluciones, las pocas que den las reglas de juego actuales. Este, sin duda, es el reto mayor de Flick que le queda por el resto de temporada.