Toca volver a la actividad después de un más que inoportuno parón de selecciones, donde hemos estado más pendientes del 'virus FIFA' que de otra cosa, pero no por ello se nos ha pasado por alto la noticia blaugrana de la semana: Ansu Fati ha vuelto a entrenarse con el grupo.
Después de un mercado de fichajes lleno de rumores sobre una posible salida y una lesión que le dejó fuera de la gira por Estados Unidos, no deberíamos olvidarnos tan rápido de Ansu Fati, jugador de sólo 21 años (cumple 22 en octubre) que deslumbró a todo el Camp Nou con su irrupción con el primer equipo, antes que una inoportuna lesión nos bajara de la nube en la que nos habíamos instalado, soñando en haber encontrado al heredero de Leo Messi (para el recuerdo queda la foto del abrazo entre ambos).
Ansu tuvo la mala suerte de toparse de cara con las lesiones, que lo ha lastrado tanto física como anímicamente, llegando hasta el punto de pedir salir cedido al Brighton la pasada temporada en busca de lo que un día fue, un jugador con algo especial, diferente, desequilibrio y sobre todo mucho gol.
La valoración de esta cesión es dudosa, pues inicialmente parecía que podía recuperar su nivel, pero otra lesión nos privó de ello, con lo que llegados a este punto el joven Fati ha regresado a Barcelona con el futuro en el aire.
Regresar al Barça con un entrenador nuevo como Hansi Flick que creía en el joven Fati era muy esperanzador, por lo que la fascitis plantar que le alejó de la gira fue un jarro de agua fría a todos aquellos que seguimos defendiendo al joven futbolista, que por encima de todo y con la edad que tiene no debe rendirse en su empeño de triunfar en el Barça.
La Liga ya ha comenzado y pese al gran arranque del conjunto blaugrana ha quedado claro que la plantilla es corta y que el equipo tiene pocos revulsivos, por lo que Ansu tiene ante sí la oportunidad de demostrar que aquella luz que nos deslumbró no se ha apagado y puede volver a ser el jugador que levantaba pasiones en el Spotify Camp Nou, con grandes actuaciones y especialmente, con goles.
Si Hansi Flick consigue recuperar a Ansu Fati para su equipo, si las lesiones le dan una tregua al jugador y éste retoma su mejor versión, sin ninguna duda el Barça habría hecho el mejor fichaje posible sin desembolsar un solo euro.
¿Quién podría decir que no quiere tener en sus filas al Ansu Fati de la 2019-2020? Aquel jugador que anotaba goles casi sin quererlo o que obligó al Camp Nou a corear su nombre. Ese Ansu podría ser el broche de oro de un equipo que con Flick ha recuperado la verticalidad, la presión asfixiante durante los 90 minutos y que ya tiene en sus filas a Lamine Yamal, Pedri, Dani Olmo o Lewandowski y que además hoy cuenta con un gran Raphinha.
El fútbol le debe una oportunidad a Ansu para recuperar su nivel y esa oportunidad debe tenerla en su casa, en el Barça, con un plan específico de trabajo como se hizo con Messi, con confianza y oportunidades, y donde se juntaría con una de las mejores generaciones de jóvenes de todos los tiempos.
Tengamos en cuenta que a Lewandowski tiene ya 36 años y le resta un año de contrato, si Ansu Fati regresara de verdad a lo largo de esta temporada, podría ser el falso 9 que tanto le gustaba alinear Guardiola, junto a otra joven joya del plantel como Lamine Yamal; dos jugadores que podrían formar una dupla mágica que podría devolver al barcelonismo al Olimpo del fútbol, como ocurrió con Messi y Suárez; dos increíbles jugadores jugando juntos y haciendo las delicias de los culers.
Al fin y al cabo, si apostamos por él puede salir bien o puede salir mal, pero la temporada ya se ha iniciado y todos los miembros del equipo deben seguir peleando para ganarse su puesto con Flick, ya que el mercado de fichajes no abre hasta enero y un traspaso a día de hoy sería prácticamente regalar a un jugador que todavía puede regresar a su nivel y que, por edad, no le ha llegado la hora de dejar de intentarlo.
A muchos se les ha dado muchas oportunidades y sin merecerlas, por lo que podemos tener paciencia por un chico de la Masia que demostró de lo que es capaz y la calidad que tiene, pero que las lesiones nos impidieron ver hasta donde podía llegar.
Ansu, aprovéchalo, te estamos esperando.