Era un secreto a voces y ahora tan sólo nos lo han confirmado: la próxima Supercopa de España se disputará en Arabia Saudí. El gobierno del criminal Mohamed bin Salmán (MBS para “los amigos”) quiere abrir el país y darle vida más allá del petróleo. Ejemplos recientes: descubrir a los turistas Hebra, ahora islamizada y conocida como Al-Ula, con la que pretenden que se convierta en la nueva Petra jordana. Otro ejemplo: el primer torneo internacional de deportes playa celebrado este pasado verano, el Beach Soccer Cup, disputado en medio de la nada, al norte del país, y con el que el gobierno se gastó lo innombrable y habían más jugadores que espectadores.
Viendo los precedentes, a Rubiales se le puso el símbolo del dólar en los ojos como si fuera el mismísimo Tío Gilito y aquí empezó todo. En paralelo, se intensificaban los contactos de Tebas con Piqué para el desarrollo de nuevos proyectos deportivos.
Gerard Piqué entabló una relación más estrecha que el propio Bartomeu con los 'capos' del fútbol español y fue quien incentivó que esta idea fuera una realidad. De entrada, cabe felicitar al defensa catalán: un genio que sabe cómo convencer y a quién dirigirse. Además, empieza a poner “la primera piedra” de su retiro, que no quiere que se base en ir al gimnasio y la vida contemplativa. Por el otro lado, la incongruencia de todo ello. Sabemos cómo piensan en muchos aspectos Piqué, Tebas y Rubiales. Están meridianamente en las antípodas el uno de los otros. De momento, más allá de los negocios, conservan una relación profesional que puede resultar difícil de entender en depende qué momentos… Y sabemos que Piqué, como sus interlocutores, no es de callarse nada.
Otra cosa: recuerdo el revuelo que se montó con el famoso partido en Miami de Liga que no se llegó a disputar. La Asociación de Futbolistas puso el grito en el cielo cuando conoció la idea y ellos no se veían recompensados. Ahora, si hay algún problema con Arabia Saudí, ya sabemos a quién deberán dirigirse los Busquets, Iscos o Kokes de turno: a su propio compañero, Gerard Piqué.