Podría referirme a la farsa del Balón de Oro (¿Messi sólo es el quinto mejor del mundo?, ¿de verdad?), pero son muchos los compañeros que han escrito sobre ello. Podría repasar el legado de José Luis Núñez (en paz descanse), pero eso lo hacen mucho mejor Juan Carlos Pasamontes, Josep Maria Cortés y Claudia Granja en sus escritos. Podría incluso analizar la vuelta del Barça a lo más alto de la clasificación, pero poco podré aportar a estas alturas de la semana. Así que propongo un viaje a la génesis de los hechos que acabo de enumerar.
El 29 de noviembre pasado, el Barça cumplió 119 años. Casi un siglo y cuarto desde que Joan Gamper y 11 amigos fundaron el club en el Gimnasio Solé. La fecha no es redonda, pero la entidad azulgrana ha aprovechado la efeméride para recuperar la crónica que Gamper escribió del primer partido de la historia del Barcelona (8 de diciembre de 1899) para el Schweizer Sportblatt.
Gamper era un genio polifacético que, entre otras labores, colaboraba con este semanario deportivo suizo. Y allí escribió la primera crónica internacional conocida del Barça, aunque no la firmó. El original, fechado el 13 de diciembre de 1899, se encuentra en el museo del FC Zúrich, que lo ha digitalizado y traducido para su difusión. El texto no es demasiado extenso, pero ayuda a reconstruir parcialmente aquellos momentos históricos.
La crónica que Gamper escribió en 'Schweizer Sportblatt' sobre el primer partido del Barça / FCB
El cronista Gamper escribió que el partido tuvo lugar en el antiguo Velódromo de la Bonanova (en una parcela hoy delimitada por las calles Vallmajor, Reina Victoria, Valero y Modolell), a las tres de la tarde (la luz artificial tardó todavía más de una década en llegar a los campos de fútbol). Los jugadores del Barcelona apenas habían completado un entrenamiento, pero se enfrentaron a los jóvenes de la colonia inglesa. Y se lo pusieron difícil, “como muestra el resultado final”.
Según Gamper, el Barcelona apenas pudo reunir nueve jugadores (formó con un 2-3-3, “con tres delanteros en lugar de cinco”), con los que trató de sorprender al equipo inglés, pero pronto tuvo que recular ante las acometidas de “los hijos de Albión”. El fundador y capitán azulgrana destacó especialmente la destreza de su compañero Urruela (el bisabuelo de la diseñadora Agatha Ruiz de la Prada), el portero; y la habilidad de los defensas, Wild y Künzli. El mismo Gamper se colgó algunas medallas por su actuación en el encuentro. Perdió el Barcelona por 0 a 1.
En España, fue Alberto Serra en La Vanguardia quien publicó la crónica más conocida del partido. Y, a decir verdad, su visión coincidió bastante con la de Gamper, aunque destacó que cada equipo lo componían diez jugadores. Los ingleses batieron a Urruela en la primera mitad. Tras el descanso, los británicos estuvieron “15 minutos” poniendo en aprietos al Barcelona, “hasta que el señor Gamper logró en una de sus impetuosas salidas conducir la pelota al campo contrario, donde se intentó un goal” sin resultado.
En ninguna de los dos crónicas, ni en ningún documento conocido, hay referencia a los uniformes que vistieron los jugadores del Barcelona en ese primer partido. Porque fue el 13 de diciembre, en una segunda reunión de los fundadores, cuando éstos determinaron que se distinguirían con los colores azul y encarnado.
Sostienen Manuel Tomás y Frederic Porta en Barça inédito: 800 historias de la Historia (Ed. Corner) que el Barcelona pudo jugar de blanco ese primer partido “por ser la solución provisional más sencilla, el color más fácil de encontrar para las camisetas”. El equipo, de hecho, usó el blanco como segundo uniforme durante muchos años, y el pantalón careció de pigmento hasta 1914.
El FC Barcelona en 1900 / FCB
Antes que el FC Barcelona ya existía en la ciudad la SF Barcelona, equipo integrado exclusivamente por ciudadanos ingleses. A falta de rivales, se enfrentaban entre ellos con dos camisolas distintas: roja y azul. Desconozco cuáles eran los colores de la colonia inglesa que se enfrentó al Barça aquel 8 de diciembre y que era heredera de la SF Barcelona; pero, ¿y si vistieron de rojo y dejaron camisolas azules a Gamper y compañía? Después del encuentro, muchos ingleses se unieron a las filas del nuevo equipo catalán. ¿Y si, con motivo de la fusión, mezclaron también los colores de sus uniformes?
En cualquier caso, ¿por qué hay que descartar que el Barcelona jugara de azulgrana desde el primer día, aunque los colores se aprobasen después? Es el gran misterio del Barça.