Joan Laporta tuvo con la sección de baloncesto una de sus primeras crisis en su primera etapa como presidente del Barça. El nombramiento de Valero Rivera como director general de las secciones y el despido de Svetislav Pesic abrió un periodo de turbulencias que no se calmó hasta las contrataciones de Chichi Creus y Xavi Pascual. Casi dos décadas después, en el viejo Palau siguen teniendo la sensación de que a Laporta solo le interesa el fútbol.
El Barça, desde hace más de una década, asumió el compromiso de construir un nuevo Palau para poder jugar la Euroliga en su pabellón. El problema, hoy, sigue enquistado. Peor, incluso. Los ejecutivos de las secciones todavía no tienen un proyecto de futuro. Nada se sabe del nuevo Palau. De su capacidad final. De su financiación. Ni tan siquiera hay una maqueta. Con el expresidente Bartomeu, en cambio, sí había un proyecto a desarrollar.
El coste del nuevo Palau
El Palau Blaugrana es el patito feo del Espai Barça. La última prioridad. Joan Laporta cifró en 420 millones de euros la construcción del nuevo pabellón polideportivo, con capacidad mínima para 15.000 espectadores. Dicha operación incluye un Petit Palau y una pista de hielo.
“Laporta es muy futbolero y en su primera etapa como presidente del Barça ya le costó mucho entender la importancia de las secciones. Más de una pitada tuvo que soportar en el Palau”, recuerda un antiguo ejecutivo.
Recortes presupuestarios
El presidente del Barça ya ha anunciado que los recortes del verano afectarán a todas las áreas del club. El presupuesto del fútbol formativo y las secciones pasará de los 108 millones de euros de esta temporada a 100 millones.
La sección de baloncesto será la más castigada por los recortes. De los 43 millones presupuestados este año se pasará a un máximo de 40 millones.
El futuro de Jasikevicius
Los recortes dificultan la renovación de Jasikevicius, muy molesto con el club por no planificar todavía la próxima temporada ni presentarle una oferta. Sanli y Kuric no renovarán sus contratos y Laporta insistirá en pedir una rebaja salarial a Mirotic y Higgins.
El fútbol sala también sufrirá un recorte importante, mientras que el impacto será menor en el balonmano y el hockey sobre patines. Y la única sección que aumenta su presupuesto es el fútbol femenino, que año tras año capta nuevos patrocinadores.