El VAR, o sistema de videoarbitraje, ha supuesto un cambio radical en el fútbol. Con mayor o menor acierto, la sensación es que la presencia de dicha ayuda para el trabajo de los árbitros ha cambiado la percepción por completo de la mayoría de los aficionados, en especial por lo que podría haber representado contar con esa tecnología en el pasado. Esa misma pregunta se hacen muchos barcelonistas, que sienten que el FC Barcelona habría ganado más Ligas con el VAR de por medio.
Desde hace semanas que el equipo de Xavi Hernández ha logrado librarse de ciertos aprietos por las decisiones de los colegiados que se encargan del videoarbitraje. En la visita a San Mamés se libraron de empatar el partido, debido a una mano cobrada Iker Munianín; mientras que en el último clásico consiguieron superar un momento de mucha tensión con el fuera de juego cobrado de Marco Asensio. Determinaciones de ese estilo habrían podido ser decisivas en la obtención de más campeonatos para las vitrinas de la entidad culé.
La Liga de Capello
La temporada 2006-07 fue una de las más disputadas en la historia de la Liga. El Barça se encontraba peleando cabeza a cabeza con el Real Madrid, que en aquel año fue dirigido por Fabio Capello. Esa edición tuvo un empate en la punta entre los dos equipos con 76 puntos cada uno, aunque los merengues se hicieron con el campeonato gracias al average particular entre ambos conjuntos.
Si bien es cierto que el FC Barcelona fue el principal responsable de la derrota de esa Liga, debido a la ventaja que tenían a su favor en buena parte de la temporada, la realidad es que no debe pasarse por alto el error arbitral que pudo mantener el título del lado culé. En un clásico disputado en el Camp Nou que terminó en igualdad (3-3), el colegiado Undiano Mallenco no pitó a favor del equipo azulgrana un penalti sobre Ronaldinho, que pudo representar una importante victoria para quedarse en lo más alto de la clasificación.
El fuera de juego de Messi
Probablemente estamos hablando de uno de los errores arbitrales más groseros de los últimos tiempos. El FC Barcelona se jugaba en casa el título de la Liga 2013-14 contra el Atlético de Madrid. Un triunfo pudo significar la conquista culé junto a su afición, pero las decisiones del árbitro de línea impidieron ese escenario. Con el partido igualado (1-1), Leo Messi anotó un gol totalmente lícito que representaba la victoria de campeonato.
Sin embargo, el línea decidió cobrar un fuera de juego que era inexistente, debido a que Messi recibió el balón de un rival. Una acción que se sigue recordando dentro del barcelonismo y que, con el VAR de por medio, podría haberse hecho justicia. Aquella temporada fue la única que dirigió Gerardo Martino, dando paso al ciclo de Luis Enrique.
Los errores de la 2016-17
Precisamente Luis Enrique también se vio perjudicado por las decisiones de los colegiados en la temporada 2016-17, la última de su ciclo al mando del FC Barcelona. Esa edición de la Liga la ganó el Real Madrid de Zidane con 93 puntos, mientras que los azulgranas se quedaron a las puertas con 90 puntos. Dicho escenario se pudo haber evitado si los árbitros no habrían cometido varios errores en contra del elenco catalán.
El primero de ellos --y el más grosero de todos-- fue cuando Hernández Hernández no validó un gol clarísimo de Jordi Alba en un partido contra el Real Betis en el Benito Villamarín. Aquel encuentro finalizó con la igualdad. Otro error que también fue clave en aquella temporada fue el tanto anulado a Gerard Piqué por un fuera de juego inexistente, durante el empate ante el Málaga. Cuatro puntos que pudieron ser la diferencia definitiva del Barça para superar a su más grande rival del fútbol español.
En las últimas dos décadas, el FC Barcelona habría podido ganar tres Ligas de existir el sistema de videoarbitraje. El VAR, con todos sus defectos y aspectos por mejorar, es una herramienta que puede traer mayor justicia al fútbol. Una tecnología que no puede rechazarse y menos cuando el arbitraje en España suele tener errores de mucha importancia.