Momento delicado para el FC Barcelona. Las lesiones de futbolistas clave como Pedri, Dembelé y Lewandowski, las dos derrotas consecutivas y todo el ruido exterior por el Barçagate de Enríquez Negreira --entre otros factores-- han derivado en una presión mediática que está afectando al rendimiento del primer equipo. Mientras algunos medios de la capital empiezan a vislumbrar una hipotética remontada del Real Madrid en Liga, el Barça está obligado a recuperar la confianza y el buen juego en el tramo más importante de la temporada 2022-23.
No será fácil, y requerirá un esfuerzo colectivo y trabajoso a nivel psicológico. Pero es necesario reaccionar, y más aún con tres clásicos a la vuelta de la esquina. La pregunta es: ¿conseguirá centrarse el Barça de Xavi y volver a competir al nivel de hace unas semanas? En Culemanía hemos tratado el asunto en profundidad con un especialista. Arnau Torelló (Mataró, 1993), responsable en psicología deportiva de la cantera del Joventut de Badalona, desgrana cuáles son los miedos que seguramente inundan a día de hoy la cabeza de los culés. Y lo más importante: qué deben hacer para recuperar la dinámica positiva. Un decálogo que ofrece una serie de claves que la plantilla debe autoaplicarse de cara a los próximos partidos. Empezando, como es lógico, por el de este jueves en el Bernabéu.
La reflexión de la causa-consecuencia
"Uno sólo puede controlar la acción, la causa", recuerda el psicólogo. "Lo que haces depende al cien por cien de ti, y el equipo debe centrarse en lo que está en su mano, sin dejarse llevar por lo que no controlan", señala en referencia a cuestiones como la del Barçagate o las lesiones. En esta coyuntura, el foco no debe orientarse hacia el resultado, sino más bien al proceso de trabajo para conseguir ese resultado. Arnau compara la situación global del equipo con la que está viviendo Ansu Fati a nivel individual. "Es similar a su caso, a su necesidad de rendir bien para cumplir con las expectativas de todo el mundo. Eso lo que genera es mayor presión. El equipo no debe centrarse en ganar sí o sí, sino en jugar de la mejor forma posible. Luego, los buenos resultados vendrán solos".
Relativizar errores y controlar emociones
Otra cuestión clave para recuperar la confianza, según Arnau Torelló, es la necesidad de asumir los tropiezos en vez de obsesionarse con ellos. "Cuando hay un error, parece que todo es un desastre. Hay que relativizarlo. Hay que gestionar el error y las emociones", dice, y pone como ejemplo la fortaleza mental del Real Madrid. Según él, no es casualidad que haya protagonizado tantas remontadas sonadas en los últimos tiempos. "Esto el Real Madrid lo lleva muy bien, porque se levanta rápido. Pero el Barça está tan centrado en cumplir expectativas, que cuando tiene un error parece que todo se desmorona", asegura. "El equipo es débil mentalmente, porque los errores puntuales se maximizan. Hay que hablarlo como equipo, olvidar las creencias desadaptativas y que todo va a ir a peor. Es imperativo pasar a las creencias positivas; pensar que la situación va a remontarse".
El bucle de pensamientos desadaptativos
Ligado al punto anterior, Arnau Torelló incide en cómo el Barça necesita salir del bucle de negatividad en el que ha entrado. "A nivel de psicología es importante trabajar esas creencias y pensamientos, enfocarse en nuevos objetivos. Trabajarlo y volver a reconectar la atención en los aspectos clave del juego, que no sean pensamientos distractores. Esos pensamientos erráticos o desadaptativos, lo que hacen es aumentar la tensión muscular, el nivel de activación... y eso hace que estemos más tensos. No estamos tranquilos, la seguridad disminuye y la confianza también. Entonces encadenas más errores, y entras en una especie de bucle", relata Arnau.
La sensación del llamado 'efecto túnel'
"Llega un punto que cuando hay mucha presión y sube el nivel de estrés, se produce este efecto túnel". Se trata de una metáfora del bucle explicado anteriormente, la particularidad de creer que nos encontramos en un túnel interminable. El Barça, en este sentido, necesita contextualizar los errores y darse cuenta de que, a día de hoy, la situación deportiva no es tan mala. "Cuando hay mucho estrés, sólo puedes ver el estímulo que te genera el miedo. En el fútbol también se da este efecto túnel, que hace que sólo pienses en volver a fallar. No haces una reconstrucción positiva de lo que está pasando", destaca el psicólogo.
Ferran Torres y la metáfora del ketchup
Hace unos días, Ferran Torres desveló que ha estado trabajando con un psicólogo para volver a rendir como antaño. Frente al Cádiz cuajó una actuación brillante la semana pasada, y aunque no estuvo al mismo nivel en Old Trafford y Almería, parece que poco a poco está remontando. Arnau Torelló relaciona esa recuperación de la confianza con la teoría del bote de ketchup. “Cuando golpeas el bote y no cae nada de nada, pero sigues golpeando... llega un punto en que luego, cuando cae, ya sale todo de golpe. Vuelves al estado de flow, te encuentras bien y te sale todo", explica. "En el tema de Ferran, él ya dijo que trabajó con un psicólogo deportivo y es cierto que sigue teniendo errores, pero menos. Antes estaba obsesionado con marcar, y ahí es donde está el error", remarca Arnau.
El campo base, antes que escalar el Everest
"Lo que está en las manos de los jugadores es hacer acciones de alta probabilidad para que el gol llegue, para que la consecuencia positiva se dé. Eso se llama llegar al campo base", incide el psicólogo catalán. "Cuando te pones mucha presión, hay que recordar las cosas que se te daban bien, las fáciles. Volver a dar buenos pases, chutar cuando se pueda, pases cortitos al pie... poco a poco coger confianza, y luego ya se probarán cosas más complicadas", señala. "Primero hay que volver a la zona de confort, donde nos sentimos seguros, y luego ya hacer cosas diferentes sin obsesionarse”.
La necesidad de volver al estado de flow
Por último, Arnau Torelló aconseja al Barça hablar los problemas que existen como colectivo. Para que después, individualmente, cada uno aplique soluciones para volver a su mejor estado de forma. "Cada uno debe conectar con los objetivos del equipo, y con lo que se plantea desde el principio. Es importante volver a encontrar el estado de flow", explica Arnau. "Al estado psicológico de que, cuando estás bien, todo parece positivo y optimista. Se trata de una sensación de seguridad permanente, la certeza de que vuelves a encontrarte a nivel óptimo de rendimiento". Si el Barça consigue o no reaccionar, lo veremos este jueves en el Bernabéu.