Higgins y Laprovittola desmontan al Real Madrid en el Wizink Center

Gran victoria del FC Barcelona en casa del eterno rival. Los de Sarunas Jasikevicius tumbaron al Real Madrid con cierta superioridad y callaron al Wizink Center en un partido muy igualado que se rompió para los azulgranas en el último cuarto gracias a la exhibición compartida de Laprovittola y Cory Higgins (78-87). 

Como cada año, regresó por fiestas el clásico del baloncesto español. En esta ocasión, en lugar de jugarse la última semana de diciembre se ha disputado el partido después de fin de año, ya en enero. Lo que no ha cambiado es la tensión entre los dos grandes colosos de la ACB, protagonistas de una rivalidad tan fiera como atractiva. 

Llull pone emoción desde su campo

La igualdad se mantuvo en el luminoso durante todo el encuentro, aunque fue el Barça quien se llevó el primer envite (26-28). Dos puntos arriba terminaron los de Jasikevicius tras los primeros 10 minutos de partido, gracias a un juego más coral que el del Real Madrid. Con muchos jugadores aportando, el Barça trataba de frenar al implacable Walter Tavares con un inspirado Sertaç Sanli, que lo defendió mejor que Jan Vesely.  

Jokubaitis defiende entre Sergio Llull y Yabusele durante el Madrid-Barça de basket / EFE

Jokubaitis defiende entre Sergio Llull y Yabusele durante el Madrid-Barça de basket / EFE

En el segundo cuarto subió la intensidad blanca, hasta el punto de lograr dar la vuelta al encuentro (44-42). Tavares contó con el apoyo de Yabusele, Musa y Poirier para invertir las tornas del partido. Nikola Mirotic (12 puntos y 10 de valoración en 16 minutos), por su parte, también hizo gala de su talento, aunque Jasikevicius sigue apostando por no exprimirlo más de lo estrictamente necesario. Sin embargo, fue Sergio Llull quien se encargó de maquillar el electrónico al anotar un triple desde su propio campo que permitió a los blancos marchar ganando al descanso. Solamente vencieron este segundo periodo.

Clave: el rebote ofensivo

El Barça recuperó fortaleza en el tercer cuarto y volvió a recuperar el marcador con un parcial de 13-20. Los azulgranas lograban llegar al último cuarto con cinco puntos de ventaja (57-62) gracias a ese juego coral y, sobre todo, gracias a una gran aportación en el rebote ofensivo, que generó más segundas oportunidades al Barça. 16 rebotes ofensivos de los azulgranas que provocaron estas declaraciones de Chus Mateo en un tiempo muerto: "El partido está en el rebote". En este sentido fue clave la aportación de Kalinic (9 puntos, 8 rebotes, 4 asistencias y 19 de valoración) y de Óscar da Silva (7 puntos, 9 rebotes y 9 de valoración), uno de los que más ayudó, junto con Sanli, a parar a Tavares. 

Tavares y Sanli, emparejados en el clásico de basket / EFE

Tavares y Sanli, emparejados en el clásico de balonesto / EFE

El último cuarto fue el de los valientes. El Real Madrid tardó escasos minutos en recortar los cinco puntos de distancia y devolver la igualada al marcador. Pero una versión estelar de Laprovittola (19 puntos, 6 asistencias y 14 de valoración) volvió a poner tierra de por medio a base de triples. Cory Higgins fue su mejor escudero, tomando el protagonismo en los cinco minutos finales con un recital de lanzamientos y penetraciones que no supo frenar el combinado de Chus Mateo (78-87). 

Al final del partido, Jasikevicus se mostró satisfecho, pero no ocultó su habitual versión crítica: "Todavía necesitamos mejorar mucho, muchos no están a su nivel todavía, tenemos que mejorar". Sin embargo, el técnico se felicitó por recuperar el mejor nivel de Higgins (18 puntos y 15 de valoración), que decidió el partido cuando más caliente estaba para terminar con un cómo triunfo azulgrana.