Normalmente, los exjugadores que han marcado época en FC Barcelona o Real Madrid pueden ver los clásicos en zonas acomodadas del Camp Nou y el Santiago Bernabéu, ya sea en los palcos o bien en tribuna. Dicho de otra forma: no suelen compartir asientos con los aficionados de a pie, sino que se codean con las élites al estar acostumbrados al lujo.
Por eso ha sorprendido tanto el caso de Dani Alves, que este domingo fue pillado en el Santiago Bernabéu disfrutando del clásico --o más bien sufriéndolo-- en las gradas del santuario madridista. La imagen, que no tardó en hacerse viral, tuvo su réplica en un mensaje que el propio futbolista compartió en sus redes sociales.
La curiosa experiencia de Alves
"Siempre hay que tener mucha personalidad para vivir cosas que uno nunca vivió. Viví el clásico hoy de una manera diferente, con sensaciones diferentes y con unas ganas tremendas de estar dentro", escribió junto a un emoji llorando de la risa. "Qué mal rodeado estuve, pero aguanté como un campeón", añadió en el citado mensaje.
Dani Alves también aprovechó para mandar un mensaje de ánimo a los culés, después de la derrota que ha servido para dejar el liderato de la Liga de nuevo en manos del Real Madrid. "Infelizmente para los culés no fue el resultado esperado, pero ser aficionado de un equipo es quererlo cuando las cosas no salen bien. Es apoyar cuando el día no está siendo bueno y nunca dejar de amarlo pase lo que pase!", escribió el brasileño.
Una acción que genera discordia
En la instantánea que compartió a través de las redes sociales, puede apreciarse a Dani Alves viendo el partido en la grada de la afición del Real Madrid. Con gorra negra y gafas de sol, posa sonriente ante las cámaras y se encuentra rodeado de decenas de madridistas, seguramente sorprendidos por la presencia del brasileño. La fotografía ha tenido cientos de reacciones y comentarios.
Mientras que a algunos seguidores culés les ha parecido divertida y valiente la decisión de Alves, a otros no les ha hecho tanta gracia que presenciase el compromiso rodeado de madridistas. Sea como sea, ya está de sobras comprobado que el carácter y la personalidad del exblaugrana nunca dejan indiferente a nadie.