El nuevo Espai Barça suscita muchas dudas. Joan Laporta, presidente azulgrana, sigue sin resolver la financiación del proyecto más ambicioso del club en el siglo XXI y la reforma del Camp Nou ha comenzado a marcha lenta y con Goldman Sachs exigiendo las máximas garantías. Más incertidumbres todavía hay sobre la construcción del nuevo Palau Blaugrana.
La junta directiva que lideraba Josep María Bartomeu cifró el coste del Palau Blaugrana en 90 millones de euros en 2016. Fue una estimación muy a la baja. En los últimos años, los nuevos pabellones que se han construido en Europa, con capacidad para 12.000-15.000 espectadores, han costado unos 200 millones de euros. El presupuesto del nuevo pabellón del Valencia, por ejemplo, se ha disparado hasta los 280 millones de euros. Laporta, por su parte, presupuestó en 420 millones el nuevo Palau, el Petit Palau y la nueva pista de hielo.
Grandes conciertos
El nuevo Palau está en una fase muy embrionaria. La junta de Bartomeu contempló, inicialmente, un pabellón para 10.000 espectadores. Laporta quiere que tenga una capacidad mínima de 15.000 espectadores y pueda acoger grandes conciertos y otras actividades. Sin embargo, todavía no hay un proyecto definido.
El Barça sigue sin resolver la financiación del nuevo Palau. No hay fecha para el inicio ni la conclusión de las obras. Se construirá en los terrenos del antiguo Miniestadi y el club pretende multiplicar los ingresos de las secciones al duplicar la capacidad del actual Palau Blaugrana.
El Petit Palau
La sección de baloncesto jugará en el nuevo Palau Blaugrana. En cambio, los equipos de baloncesto, fútbol sala y hockey patines lo harían, mayoritariamente, en el Petit Palau, que tendrá un aforo que oscilará entre los 3.000 y los 4.000 localidades.
Los directivos y ejecutivos barcelonistas buscan invesores para el Espai Barça, que costará unos 1.500 millones de euros. En el Barça priorizan la remodelación del Camp Nou y no descartan que una multinacional asuma el coste del nuevo Palau a cambio de su explotación.
Más ingresos
Fuentes del Barça admiten a Culemanía que el nuevo Palau difícilmente se podrá inaugurar antes de 2027. El actual, construido en 1971, no reúne los mínimos que exige la Euroliga --su aforo es de apenas 7.500 asientos-- y limita los ingresos del Barça.
La sección de baloncesto, por ejemplo, ingresa unos 14 millones de euros por temporada entre abonados, venta de entradas, derechos de televisión y patrocinadores. Con el nuevo Palau, el club espera lograr entre 20 y 25 millones de euros anuales. El Real Madrid, máximo rival de los barcelonistas, logró 17 millones de euros la pasada temporada.