Antoine Griezmann seguirá en el Atlético de Madrid la próxima temporada. El equipo colchonero cuenta con el jugador y tendrá que buscar otras opciones para deshacerse del problema que tiene con el fair play financiero. En los últimos días, el delantero había protagonizado una polémica con informaciones que apuntaban a su posible marcha del conjunto rojiblanco. La salida del francés perjudica directa y económicamente al FC Barcelona.

El Atlético de Madrid tiene que vender jugadores de su plantilla para poder inscribir a Axel Witsel, nuevo fichaje del club a falta de anuncio oficial, y también para seguir fichando en este mercado de traspasos. Si el delantero de Macon continúa siendo un habitual en los once titulares del Cholo Simeone, y cumple con la claúsula de jugar el 50% de los partidos en su segunda temporada cedido, el Barcelona se embolsará 40 millones de euros.

Complejidad económica

El gran obstáculo que tiene el Atlético en este mercado es fichar reduciendo el limite que impone el fair play financiero, que en el caso del conjunto colchonero se sitúa en 100 millones de euros. "Para fichar lo necesitamos, tenemos que ver a quien se vende y a quien se compra. Son 40 millones lo que tenemos que vender, pero está difícil el mercado y la situación económica ya sabéis cómo es", declaró el presidente Enrique Cerezo durante la presentación en el Wanda Metropolitano de la MADCUP 2022

TWEET GRIEZMANN

El tweet de Antoine Griezmann respondiendo a los rumores sobre su futuro / TWITTER

Atento a la actualidad deportiva y los rumores sobre su futuro, Antoine Griezmann se pronunció a través de su perfil de Twitter. Dos iconos con los colores del Atlético y las iniciales "ATM" fueron su respuesta a las informaciones. No en vano, el extremo es uno de los jugadores imprescindibles para Simeone, principal promotor del regreso del jugador a Madrid. La pasada temporada, el Principito disputó 39 partidos oficiales, en los que marcó ocho goles y dio siete asistencias.

Griezmann volvió a la disciplina colchonera tras dos temporadas en el Barça, donde no terminó de acoplarse al equipo y en repetidas ocasiones se especuló con una mala relación con Leo Messi. El club blaugrana pagó 120 millones de euros por el crack francés, más otros 15 millones por derechos preferentes de Saúl y Giménez que estaban indirectamente vinculados a la operación Griezmann. Para su regreso al equipo presidido por Enrique Cerezo, se pactó una cesión de dos años con opción de compra obligatoria de 40 millones si Griezmann completa el 50% de partidos posibles.