El FC Barcelona está apostando por una remodelación low-cost. No solamente en el primer equipo, sino también en el filial dirigido por Sergi Barjuan. Dicho conjunto, que seguirá disputando la Primera RFEF, sufrirá varios cambios de cara al próximo curso. La directiva azulgrana ha decidido no renovar el contrato de varios futbolistas y, además, de no volver a contar con algunos futbolistas que fueron cedidos. Un escenario que invita a una transformación radical para la 2022-23, en especial si tomamos en cuenta que ya se dio a conocer la venta de Ferran Jutglà.
Los jugadores que no renuevan
En este sentido, el Barça B no contará con los servicios de varios futbolistas, como es el caso de Jandro Orellana, Gerard Fernández y Santiago Ramos Mingo. Dicha información fue confirmada por el periodista Albert Rogé, que asegura que el club ha preferido no ejecutar las cláusulas de las renovaciones de estos jugadores en concreto.
El caso de Orellana es uno de los más significativos, sobre todo si tomamos en cuenta que ha sido un canterano muy bien valorado por su talento en la mitad de la cancha. No obstante, la intención de la entidad culé es dar paso a otros futbolistas del Juvenil A que puedan ocupar cada una de esas plazas y así aligerar los gastos en el filial, que tendrá la difícil tarea de batallar en la Primera RFEF contra equipos competitivos.
Las cesiones que han expirado
Por otra parte, también hay que tomar en cuenta que el Barça B no extenderá la permanencia de futbolistas como Ángel Rodado y Jordi Escobar, quienes pertenecen al Ibiza y la UD Almería, respectivamente. Los atacantes apenas pudieron ser útiles en la parcela, anotando entre los dos la cifra de ocho goles. A partir de ahora el frente de ataque del cuadro azulgrana tendrá nuevos rostros.