El mes de abril ha sido un tormento total para el FC Barcelona. A pesar de vivir dos meses ilusionantes (febrero y marzo) con resultados que invitaron a soñar a gran parte de la afición, la realidad es que todo se fue a la borda a partir de la eliminación en la Europa League. Esa catastrófica derrotar contra el Eintracht de Frankfurt no solo ha significado un golpe deportivo, también en lo que se refiere a la asistencia del Camp Nou, que ha descendido considerablemente.
La afición se desconecta
La decepción de los hinchas azulgranas con relación a la invasión de alemanes durante los cuartos de final de la Europa League ha sido, probablemente, el primer motivo de la desconexión con el primer equipo. Esa noche quedará marcada en la historia del FC Barcelona como un suceso realmente negativo, siendo uno de los causantes de la baja asistencia de los recientes enfrentamientos.
Tras la eliminación en la competición europea, el equipo de Xavi Hernández solo tiene que enfocarse en cerrar de la mejor manera posible la temporada en la Liga. Pero la afición no ha estado del todo presente. En el cruce contra el Cádiz (18 de abril) solo asistieron 57.495 espectadores, lo que era un indicativo de la frustración de los barcelonistas por lo sucedido contra el Eintracht. Hay que recordar que la grada de animación decidió faltar al compromiso en señal de protesta.
Contra el Rayo Vallecano la situación fue la misma, incluyendo el desastroso resultado (0-1). En dicho enfrentamiento asistieron 57.023 espectadores, pero hay que tomar en cuenta que en esta oportunidad regresaron los integrantes de la grada de animación. No es ni de cerca la asistencia más baja en la era de Xavi como entrenador azulgrana, debido a que ante el Elche (18 de diciembre) se registraron un total de 41.664 personas, pero es claro que la situación ha llegado a un punto crítico.
El equipo de Xavi en caída
Es evidente que no puede relacionarse únicamente la situación de la baja asistencia con el mal rendimiento del FC Barcelona. Pero sí es importante destacar que ambos coinciden de manera precisa. El recinto culé ha dejado de ser un punto de motivación en los últimos partidos, siendo el cruce contra el Eintracht el que más afectó a nivel emocional a los jugadores.
El hecho de quedar fuera de la Europa League ha dejado tocada a la plantilla que dirige Xavi Hernández. Ese golpe en lo anímico se ha visto reforzado con el poco ambiente que se vive en el Camp Nou. Actualmente el cuerpo técnico no está encontrando las respuestas para mejorar el nivel del colectivo, lo cual ha dejado una mezcla negativa que deja al club en una posición incómoda para cerrar la temporada.
El Barça Femenino sí ilusiona
Curiosamente es el Barça Femenino la excepción a estos problemas. Mientras el equipo masculino está en una racha negativa, el conjunto dirigido por Jonatan Giráldez se encuentra en momento fantástico. No solo por los resultados obtenidos en todos los torneos, sino también por la tremenda respuesta de la afición en los dos partidos que se han jugado en el Camp Nou.
Dos partidos consecutivos en los que el Barça Femenino representó un golpe de ilusión para el barcelonismo, quienes han querido mostrar su apoyo con dos asistencias históricas en el feudo culé. En cuartos de final y semifinales registraron 91.553 y 91.648 espectadores. Ambas cifras se ubican en lo más alto del récord mundial en asistencia de un partido de fútbol femenino. Las jugadoras azulgranas son las que están dando la cara por el FC Barcelona.