El Barça ha vuelto. Y lo ha hecho haciendo daño donde más duele: en el Bernabéu. La apoteósica victoria del conjunto de Xavi Hernández levanta ampollas y ha disparado el canguelo en la capital. Así lo refleja nuestro madridista más ilustre, Alejandro Tercero, que ya no las tiene todas con la Liga. El Real Madrid sigue siendo claro favorito al título liguero, pero la ventaja es de 12 puntos y quedarán en nueve si el Barça, que tiene un partido menos, acaba ganando al Rayo. Todavía le quedan nueve partidos al club blanco y todo puede pasar, especialmente si no regresa la mejor versión de Benzema o si no recuperan la confianza, perdida tras el clásico.
El Barça, habituado a ganar por goleada
En Culemanía seguimos de resaca y este martes hemos querido debatir sobre el partido del domingo. La puesta en escena blanca es indefendible y el principal damnificado es Carlo Ancelotti, muy debilitado tras el ridículo vivido. Sin embargo, la goleada pudo ser mayor. Ese es uno de los argumentos a los que se agarra Tercero para justificar que lo que se vivió en el Bernabéu no se puede considerar una humillación. Para tratar de hacer daño, recordó el 2-8 contra el Bayern, como ejemplo de lo que sí es una humillación.
Lluís Regàs, nuestro culé de referencia, no perdió ocasión de hacer sangre y recordó que las victorias del Barça suelen ser por goleada: "En cambio, las del Madrid suelen ser gracias a algún penalti o con expulsiones perdonadas y por la mínima". El debate está servido. Bendita resaca.