Noche triste para Luis Suárez. El jugador del Atlético de Madrid no tuvo su mejor partido, ya que sufrió un percance en forma de lesión que le impidió jugar el encuentro en su totalidad. Se marchó entre lágrimas y con mucha impotencia.
Luis Suárez llorando con el Atlético / Redes
Ocurrió en el primer cuarto de hora del partido ante el Oporto, en la última jornada de la fase de grupos de la Champions League. Los colchoneros se jugaban la vida. Finalmente no hubo que lamentar una eliminación ya que todo salió de cara: el Atleti ganó a los portugueses y el Liverpool hizo lo propio ante el Milán.
Suárez, sustituido
Todo ello pasó sin Suárez en el campo. El exjugador del FC Barcelona tuvo que salir sustituido por el Cholo Simeone, que dio entrada a Matheus Cunha. Luis Suárez se marchaba debido a unas molestias musculares.
Griezmann celebra junto a Correa el pase del Atleti / EFE
De repente, las lágrimas en sus ojos se hicieron visibles, lo cual demostraba la impotencia y la rabia que sentía el uruguayo sobre su persona. La gran duda será si llegará al derbi liguero ante el Real Madrid.
Sin embargo, la noche europea de ayer tuvo final feliz. No todo fueron malas noticias ya que el equipo presidido por Enrique Cerezo selló el pase a octavos de final de la Champions gracias a la victoria ante el Oporto. Eso sí, hubo varias trifulcas: Carrasco y Wendell, uno por equipo, vieron la roja en dos tanganas casi seguidas que paralizó el partido en el ecuador de la segunda mitad. Después, tanto el Atlético como los portugueses vieron cómo le expulsaban un miembro del cuerpo técnico y Machesín, portero suplente del Oporto, también se fue a los vestuarios.