Conquistadores en Estambul. El equipo de baloncesto del Barça logró una gigantesca victoria (93-95) contra el Anadolu Efes, en lo que fue el treceavo compromiso de la Euroliga. Los pupilos de Sarunas Jasikevicius lograron un épico triunfo, a pesar de los numerosos errores arbitrales que dificultaron el desarrollo del partido. El carácter del equipo fue fundamental para sobreponerse a esa compleja situación, además de tener como líder a un Sertac Sanli que se creció en su país con 24 puntos.
Golpe tras golpe
La primera mitad del enfrentamiento, disputado en la ciudad de Estambul, fue favorable para el conjunto local. Si bien el equipo azulgrana comenzó con mucha seguridad en ataque, especialmente por la aportación inicial de Nicolás Laprovíttola con cinco puntos; sin embargo, todo empezó a torcerse a partir del despertar de varios jugadores del Anadolu Efes, entre los que destaca Krunoslav Simon (siete puntos en el primer cuarto).
Jokubaitis, en una acción contra el Anadolu Efes / EFE
A esa precisión del elenco turco, también se sumó una serie de polémicas arbitrales que perjudicaron al Barça de Jasikevicius. Un montón de situaciones fueron señaladas como tiros libres para los rivales, mientras que para los culés no existía ese mismo criterio, lo que dio a pie a una gigantesca distancia en puntos en ese apartado. A pesar de los golpes recibidos, los azulgranas no permitieron que el contrario se alejara en exceso del marcador.
Despertar ofensivo
Dichas sensaciones positivas que fue exhibiendo el Barcelona en los dos primeros cuartos, terminó evidenciándose en la otra mitad del compromiso. Uno de los que protagonizo ese momento favorable fue Nikola Mirotic, que logró sumar hasta 10 puntos en el tercer cuarto. Esos minutos fueron un intercambio de ataques constantes, aunque al final el equipo catalán consiguió recortar la diferencia (68-62) para el cierre.
Toda la emoción recayó sobre el último cuarto. La mejora del Barça fue apagando al Anadolu Efes, a tal punto que comenzaron a tener varios errores notables en sus momentos de ataque. Esa confianza en defensa fue trasladada hasta la ofensiva, que tuvo la increíble aportación de Sertac Sanli con dos triples consecutivos que ayudaron a meter miedo en la afición presente en el recinto deportivo.
Sin embargo, la tensión no iba a ser tan fácil de superar. Los importantes puntos de Sanli dieron una gran ventaja al cuadro culé, pero el equipo no fue capaz de rematar al rival cuando estaba en un mar de dudas. Nigel Hayes falló dos tiros libres, el equipo no gestionó correctamente las últimas posesiones y el árbitro señaló una falta inexistente de Mirotic, que implicó los dos puntos necesarios (80-80) del rival para llevar el partido a la prorroga.
Intensidad final
La prorroga fue disputada por los dos equipos, a través de lo deportivo y las quejas de los presentes. En las primeras acciones terminaron por sentenciar a Mirotic y Larkin por llegar a las cinco faltas personales, pero también fue expulsado el entrenador del Anadolu Efes por las fuertes quejas a los árbitros ante dos faltas que cobraron a favor de los azulgranas. En ese caos, sobresalió la figura de Kuric con siete puntos (un triple) para adelantar a los suyos.
Finalmente los puntos de la ventaja definitiva fueron de Rokas Jokubaitis con tres puntos. El equipo logró hacerse fuerte a través del rebote –una de las grandes ventajas de la noche— y la fortaleza mental, a pesar de no contar con Mirotic en casi toda la prorroga. El triunfo (93-95) deja al Barça en lo más alto de la Euroliga.