El crack del Barça elegido para entrar en un trueque con el Manchester United

Philippe Coutinho no triunfará en el Barça. Dos partes condenadas a entenderse, ya que ninguno de ambos bandos parece dispuesto a aguantar más esta situación. Sería raro si el brasileño llegara más allá de junio de 2022 como jugador azulgrana. La llegada de Xavi es la última oportunidad para reconducir el talento de un fantástico futbolista que jamás ha justificado lo que persiguió Bartomeu su fichaje. Y mucho menos lo que se pagó. 

El ex del Liverpool tiene buen cartel en Inglaterra. Algunos clubes están dispuestos a darle una segunda oportunidad. Eso sí, no quieren desembolsar una cuantía de dinero similar a la que soltó el Barça en el pasado. El Manchester United puja, pero no muy fuerte. Ofrece a jugadores como recambio: Cavani o Lingaard. Incluso Martial o Rashford estarían en una situación parecida. 

Problemas físicos y futbolísticos

La carrera de Coutinho en Barcelona ha ido de más a menos. El día de su debut ante el Espanyol el Camp Nou se frotaba las manos. Ingresó de suplente en la segunda parte e hizo las delicias de la grada. Eléctrico, fino y tremendamente implicado. El mismo campo que ahora le silba y ya no aguanta su forma de jugar. 

Coutinho jugando con el Barça contra el Dinamo de Kiev / FC Barcelona

Su segunda temporada, primera completa, fue un fracaso. La entidad barcelonista se lo quitó de encima con una cesión de un año al Bayern de Munich. Regresó a España con el propósito de triunfar entre ceja y ceja. Un buen comienzo de temporada que se apagó por una lesión muscular. Poco más de tres semanas antes de romperse el menisco y decir adiós a todo el año. 

En su vuelta se ha visto a un jugador que lo intenta, pero que no puede. Sus retenciones de balón y sus pérdidas continuas están penalizando a su equipo en la fase ofensiva del juego. No construye y cuando lo hace es con lentitud, dejando que los rivales se sientan cómodos dejándole sobar el balón. 

Es uno de los temas que tendrá pendiente Xavi al llegar. Si darle una nueva chance, o simplemente condenarlo al ostracismo y apostar por los canteranos. 

Su mejor año, en el Bayern

Los bávaros liberaron a Coutinho. Tampoco fue lo que esperaban, ni se acercó al jugador del Liverpool, aunque su rendimiento fue mucho más aceptable que en Barcelona. Nunca llegó a ser titular indiscutible, pero dejó 11 goles y nueve asistencias en 38 partidos.

Coutinho celebrando la Champions League con el Bayern / REDES

A nivel colectivo fue inmejorable. El Bayern consiguió el triplete y levantó la Champions de Lisboa. Jugó como si de un juguete se tratara con el Barça en cuartos de final, donde le endosó un 2-8, y al brasileño solo le bastó unos minutos en la segunda mitad para marcar un doblete. 

Lo que es seguro es que si sale, no volverá. Los culés no repetirán fórmula en forma de cesión y se irá para recolectar dinero o conseguir un nuevo fichaje.