Segunda derrota consecutiva en la Euroliga. El equipo de baloncesto del Barça no logró imponerse (75-70) en su visita al feudo del Olimpia Milán, en lo que fue el octavo partido del torneo continental. A pesar del gigantesco esfuerzo final de los dirigidos por Sarunas Jasikevicius, que en un momento de la noche lograron tener el marcador a su favor, no pudieron resistir los duros golpes del rival. La principal ventaja del cuadro italiano fue el tiro de larga distancia, que fue de un 38% de acierto con respecto al 19% de los blaugranas.
Mucha imprecisión
El enfrentamiento disputado en territorio italiano comenzó con varios problemas para los jugadores culés. Los rivales consiguieron herir a profundidad a la defensa del Barça con la precisión de los triples (cuatro de cinco en el primer cuarto), especialmente con la producción de Devon Hall. En ese sentido, los azulgranas no lograron cubrir acordemente esas acciones, por lo que tuvieron que remar contra la corriente. Jasikevicius dispuso en el tramo final de un quinteto con mayor poderío físico, pero igualmente no pudieron recortar esa ventaja inicial (28-21).
Una canasta de Sanli, en el partido entre Olimpia Milán y Barça / FCB
Curiosamente el segundo cuarto tendría como aspecto destacable la poca cantidad de puntos anotados entre los dos equipos. El porcentaje de disparos cayó enormemente en ese tramo del compromiso, en donde el Barça no pudo acercarse en el marcador. La falta de confianza de los jugadores en los triples terminó penalizando lo que pudo ser un momento clave de la noche. En esos minutos, Jokubaitis fue uno de los más importantes por sus primeros puntos, pero igualmente no bastó para la ofensiva del Barcelona.
Notable esfuerzo
La dinámica del tercer cuarto continuó con el mismo camino: el equipo italiano sacando ventaja de sus jugadas ofensivas, sobre todo con la aportación de Luigi Datome. Si bien Nikola Mirotic apareció en momentos puntuales para sostener a los suyos, la realidad es que el conjunto de Jasikevicius no tuvieron suficiente puntería para mejorar el panorama del enfrentamiento.
Nigel Hayes, organizando un ataque contra el Olimpia Milán / EFE
Sin embargo, la agresividad del Barça apareció en el momento más importante del compromiso. Los jugadores culés lograron intimidar al Olimpia Milán en los primeros pasajes del último cuarto, aprovechando especialmente los errores que cometieron en los disparos. Brandon Davis surgió como una figura clave en esos minutos a partir de sus ocho puntos. El elenco azulgrana pudo tomar la ventaja (63-65), pero los triples de Shields y Datome volvieron a marcar la diferencia final a favor los locales, que terminaron con un triunfo (75-70) que les permite ser líderes en solitario.