Ronald Koeman ya es historia. Una historia maravillosa como jugador del Barça y una historia no tan bonita como entrenador, aunque ganó la Copa del Rey en una temporada muy accidentada. Despreciado por Joan Laporta en los últimos meses, el técnico neerlandés ha sido muy correcto en las ruedas de prensa, hablando claro pero con elegancia. Y con algunas expresiones memorables. Divertidas.
Recientemente, Koeman habló de los problemas del Barça para hacer un fútbol atractivo. Su equipo en nada se parecía, por ejemplo, al Barça de Guardiola de hace una década. Un equipo que alcanzó fama y prestigio en todo el mundo. Entonces se hizo famosa la expresión Tiki-Taka. El neerlandés hizo su propia versión cuando hablo del Tiki-Taki ante la sorpresa de los periodistas. Sorpresa y sonrisas.
Koeman habla un español muy correcto. En el Barça estuvo seis temporadas como futbolista. Y como entrenador también dirigió al Valencia. Algunas expresiones, sin embargo, no las domina. Él habla de rendimiento cuando, en realidad, piensa en efectividad. “Al equipo le falta rendimiento”, ha dicho en más de una ocasión en la que el Barça ha desaprovechado claras ocasiones de gol. No rectificó en 15 meses.
Igual que Cruyff
Al más estilo Cruyff, Koeman también tenía problemas para pronunciar los apellidos de algunos futbolistas. Por ejemplo, se liaba con Mingueza, a quien bautizó como Mingüeza. También se equivocó con otro futbolista procedente de la cantera: Collado. Al delantero, con quien nunca sintonizó, le llamó Collada.
Koeman lo ha pasado mal en los últimos meses. Su entorno asegura que, ahora, se siente liberado. Y en el recuerdo también quedará su saludo antes de una rueda de prensa complicada, en la que muchos ya daban por segura su inminente destitución. “Buenos días, mis amigos de la prensa”, dijo, emulando a Van Gaal. En 2000, el extécnico del Barça añadió: “Me voy”. Koeman, en cambio, agregó: “Me quedo”. Duró poco, pero fue una frase divertida en un momento muy malo.