La cobarde sanción a Mourinho por agredir a Tito Vilanova cumple 10 años
Villar finalmente indultó al técnico del Real Madrid en plena guerra entre los dos grandes clubes españoles
5 octubre, 2021 14:50La agresión de José Mourinho a Tito Vilanova tuvo un castigo muy leve que, finalmente, ni se cumplió. El juez único del Comité de Competición de la Federación Española de Fútbol, Alfredo Flórez, sancionó solo con dos partidos al técnico portugués por meterle el dedo en el ojo al entonces segundo entrenador del Barça. La sanción debía cumplirse en la Supercopa y el castigo fue, finalmente, levantado por Ángel María Villar.
El 17 de agosto de 2011, Barça y Real Madrid disputaban el partido de vuelta de la Supercopa de España. En la ida, los dos grandes colosos de la Liga habían empatado (2-2). La cita del Camp Nou se presagiaba caliente, tras los incidentes de la temporada anterior en la final de la Copa del Rey (ganada por los blancos) y en las semifinales de la Champions (con victoria azulgrana).
Dura entrada de Marcelo
El Barça se imponía al Real Madrid (3-2) cuando el tiempo reglamentario ya se había cumplido. Una espectacular volea de Messi daba el título al conjunto azulgrana en un partido trepidante, con muchas ocasiones de gol. En el tiempo de añadido, Marcelo realizó una dura entrada a Cesc y se montó una buena bronca en el césped.
Guardiola protestó efusivamente. Mourinho, impotente, reaccionó de la peor manera posible. Encaró al ayudante de Guardiola, Tito Vilanova, por la espalda y le metió los dedos en el ojo. El segundo técnico barcelonista reaccionó con una colleja al entonces entrenador del Madrid.
El desprecio de Mourinho
Al acabar el partido, Mourinho ironizó con el nombre de Vilanova. “¿Pito?”, dijo en plan de mofa. Minutos después, Guardiola se mostró mucho más serio: “Algún día pasará algo grave en un partido de fútbol”. Años más tardes, tras el fallecimiento de Vilanova, Mourinho lamentó su acción: "Fallé yo".
La Federación Española de Fútbol se tomó el tema con calma. Flórez abrió un expediente seis días después, el 23 de agosto. Inicialmente contemplaba que la agresión era una falta grave, que hubiera comportado un castigo de cuatro a 12 partidos. Finalmente consideró que se trataba de una falta leve.
El indulto de Villar
Flórez impuso dos partidos a Mourinho y uno a Vilanova. El 10 de julio de 2012, casi un año después, el entonces presidente de la Federación Española de Fútbol, Ángel María Villar, levantó el castigo y concedió un indulto a los dos técnicos. La agresión del portugués se quedó sin sanción.