La directiva de Joan Laporta tenía durante todo el verano una lista de jugadores prescindibles que estaban dispuestos a mover en el mercado de fichajes. Esa misión estaba destinada a ayudar al saneamiento del área financiera. En el día final de traspasos, el FC Barcelona consiguió sacar a varios de estos futbolistas, pero hubo uno entre ellos que no estaba preparado para esa posibilidad: Emerson Royal.
Laporta y Emerson en la presentación del brasileño / FC Barcelona
El brasileño conversó abiertamente en una entrevista con el diario Marca sobre esa inesperada salida en el último día del mes de agosto. “Yo pensaba que el club quería que me quedase. Jugué el domingo de titular, al día siguiente me desperté y me fui a entrenar tranquilo. Ahí ya empecé a ver que salían un montón de cosas; que el Tottenham hablaba con el Barcelona, que lo tenían casi hecho... Yo no entendía nada de lo que estaba pasando porque no sabía nada. Por la tarde me llamaron del club para que fuera a la Ciudad Deportiva porque querían hablar conmigo y ahí ya me enteré de que me querían vender”, expresó el lateral derecho.
Emerson detalla que se encontró con los dirigentes de la entidad azulgrana y que empezaron a describir la delicada situación económica que están atravesando. Eso fue una directa declaración de intenciones para el jugador. Tras ese momento declaró lo siguiente: “Yo soy listo y llegó un momento en el que me di cuenta que me estaban diciendo que me fuera sí o sí. Me estaban echando con muy buenas palabras”.
Joan Laporta, del Barça, en la presentación de Emerson Royal / Redes
Ilusión rota
En su presentación, el exjugador del Real Betis demostró una emoción palpable por vestir la camiseta culé. A pesar de que tenía la posibilidad de forzar su permanencia en el FC Barcelona, decidió cortar las relaciones de una forma sana. “Yo tengo la ambición de jugar. Sé que soy futbolista con contrato y podía decir que me quedaba, pero soy una persona que quiere ser feliz. No deseo quedarme en un club al que quiero, pero triste. Sabía que su pensamiento no era que me quedara, sino que saliera. Entonces decidí irme. Me dije que no me iba a quedar aquí triste”, señaló.
Por otra parte, también dejó entrever su decepción por las maneras en las que la directiva de Laporta gestionó toda la situación. “Sí que me dolieron las formas. Pudieron ser de otra manera. Había mejores formas de arreglar las cosas. Cuando llegué estaba seguro que el Barcelona no quería venderme, pero viendo lo que ha pasado tengo claro que cuando me ficharon ya tenían en mente la idea de venderme”, manifestó el ahora futbolista del Tottenham de Inglaterra.