Ante 60.000 personas en un Wembley lluvioso, la Selección Italiana se ha proclamado campeona de la Eurocopa tras vencer a Inglaterra en la tanda de penaltis después del 1-1 al final. El partido, dominado por Inglaterra en la primera mitad, ha cambiado con las sustituciones de Mancini, que ha invertido la jerarquía del partido. Italia se convierte en campeona de manera justa y merecida después de una Eurocopa impecable.
Harry Kane en una acción ante Italia en la final de la Eurocopa / EFE
Un gol relámpago que cambió el partido
El conjunto inglés ha salido enchufadísimo y al segundo minuto de partido un centro de Trippier al segundo palo encontraba a un Luke Shaw que metía el 0-1 a placer. El planteamiento de Southgate se ha visto favorecido enormemente: su línea de tres centrales con dos carrileros era la formación perfecta para defender una ventaja el máximo de tiempo posible.
Los rápidos ataques ingleses han seguido aprovechando una banda derecha algo descuidada por la zaga azzurri. Rice y Phillips han sido los protagonistas de un centro del campo inglés concentrado en parar los contraataques italianos, algo para lo que Mancini no acababa de encontrar una solución. En el ecuador de la primera parte Jorginho salía lesionado, pero se las apañaba para volver al terreno de juego.
Lorenzo Insigne en una acción ante Inglaterra en la final de la Eurocopa / EFE
La primera acción peligrosa de Italia llegaba de los pies de Chiesa, que mandaba un tiro lejano y raso con la zurda que salía por poco. Este disparo suponía el principio del tramo final de la primera mitad, en el que Italia ha controlado más el balón y se ha acercado al área inglesa con peligro, aunque sin éxito.
Marea azzurri en la segunda parte
Nada más empezar la segunda parte Barella veía una tarjeta amarilla, y en la siguiente acción Sterling pedía penalti por un contacto leve en el área azzurri. Mancini ha hecho un doble cambio en el minuto 55: Berardi y Crisante por Barella y Immobile, y al minuto Italia tenía su mejor ocasión. Parecía que el movimiento de fichas de Mancini podía funcionar, y que Italia empezaba a cerrar jugadas. En el minuto 62, Pickford hacía un paradón dificilísimo a Chiesa, que ya veía el empate dentro.
Inglaterra ha decidido no encerrarse y ha seguido atacando, pero Italia ha conseguido empatar el partido en el minuto 65 gracias a un remate de Bonucci después de una serie de rebotes en el área. Al minuto 70, Italia tenía el 71% de la posesión de la segunda mitad.
Bonucci celebra el 1-1 ante Inglaterra en la final de la Eurocopa / EFE
Lejos de reaccionar, Inglaterra ha metido a Saka por Trippier y Henderson por Rice para pasar a un 4-3-3, pero Italia ha seguido encerrando a los de Southgate en su propia área. En el minuto 80 la estrella de Italia, Federico Chiesa, caía con un golpe al terreno de juego, y era sustituido por Bernardeschi. En la recta final de los 90 minutos ha parecido que ambos equipos bajaban los brazos, y en ningún momento de los seis minutos de tiempo extra ningún equipo ha hecho esfuerzos por generar peligro.
La prórroga del cansancio
La media hora adicional empezaba como terminó la segunda parte, con ambas selecciones estáticas, pero con una Italia algo más comoda con el balón que no Inglaterra. Las sustituciones de Mancini han aportado una fuerza renovada a los azzurri, pero los de Southgate no se desconectaban del todo: un tiro lejano de Phillips pasaba cerca de la meta de Donnarumma.
En el minuto 100 Jack Grealish sustituía a un Mason Mount que ha pasado desapercibido en uno de sus peores partidos como jugador de Inglaterra. La más clara de la prórroga llegaba en el 104: Emerson estaba a centímetros de conectar con Cristante, y Belotti no conseguía cazar el rechace.
Federico Chiesa ante Inglaterra en la final de la Eurocopa / EFE
La segunda parte de la prórroga ha empezado con locura en ambas áreas, en las que ningún equipo ha concretado un remate a puerta. En el área azzurra el protagonista ha sido Giorgio Chiellini, que pese a tener una tarjeta ha sido providencial en tareas defensivas. A menos de diez minutos de irnos a la tanda de penaltis, Inglaterra aprovechaba la ausencia de Verratti para encerrar algo más a Italia y girar las tornas.
En el minuto 113 el árbitro se comía una tarjeta roja clarísima sobre Jorginho, que clavaba los tacos en la pantorrilla de Jack Grealish en una acción feísima. En el 117 Mancini introducía a Florenzi por Emerson, pensando ya en la tanda de penaltis. Gareth Southgate hacía lo propio metiendo a Jadon Sancho y Marcus Rashford por Henderson y Walker tan solo un minuto después. Con el 1-1 final se llegaba a la tanda de penaltis.
En la tanda de penaltis han marcado Berardi y Kane, pero Belotti ha visto el tercer penalti atajado por el portero inglés. Maguire y Bonucci han cumplido, pero Rashford ha igualado la tanda al mandar un balón al palo. Bernardeschi ha puesto por delante a Italia y Gigi, héroe de todo un país, ha parado el penalti a Sancho. Jorginho solo tenía que marcar, pero Pickford se ha hecho enorme. En el penalti decisivo, Donnarumma ha vuelto a hacerse enorme y ha parado el penalti a Bukayo Saka. Italia se convertía en la nueva campeona de la Eurocopa.